Con sus llamativas calles arboladas de naranjos, su renombrada gastronomía y monumentos espectaculares como la Plaza de España o el Real Alcázar, no sorprende que Sevilla se haya convertido en un destino principal para turistas ávidos de empaparse de cultura española.
De hecho, la Perla de Andalucía es la tercera ciudad más popular de España entre los visitantes, con aproximadamente 4,8 millones de viajeros tan solo en 2024, por detrás de Madrid y Barcelona.
Pero este constante flujo de visitantes puede acarrear consecuencias indeseadas.
Según datos publicados por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, Sevilla es la ciudad de España con el mayor número de apartamentos turísticos que operan al margen de la normativa, con 2.289 unidades.
Otros destinos turísticos cercanos le siguen de cerca: Marbella (1.802), Málaga (1.471), Benalmádena (926) y Fuengirola (686) presentan también altos niveles de viviendas turísticas ilegales.
Andalucía es la peor región a nivel nacional, con 16.740 alojamientos turísticos ilegales identificados, seguida de las Islas Canarias (8.698), Cataluña (7.729), la Comunidad Valenciana (7.499) y Galicia (2.640).
De sus ocho provincias, Málaga es la que presenta la situación más grave, con más de 8.000 inmuebles que no cumplen los estándares legales de registro, ya sea en niveles mínimos de habitabilidad o en normas de seguridad.
Le sigue Cádiz con 2.849 alojamientos, después Sevilla (2.533) y Granada (1.250).
LECTURA ADICIONAL: Sevilla puede cortar legalmente el suministro de agua a apartamentos turísticos ilegales, dictamina un tribunal
El verano pasado, el ayuntamiento de Sevilla prometió declarar la guerra a la proliferación de alojamientos turísticos ilegales cortando el suministro de agua a los apartamentos que operen irregularmente.
Tres propietarios recurrieron la medida, pero sus quejas fueron desestimadas por los tribunales, que confirmaron la legalidad de las acciones municipales.
En Barcelona, el alcalde Jaume Collboni anunció que la ciudad prohibirá efectivamente los apartamentos turísticos para 2028 al no renovar las licencias de más de 10.000 pisos que actualmente operan de forma legal.
El pasado fin de semana, el presidente del gobierno Pedro Sánchez anunció planes para retirar 53.000 viviendas turísticas de las plataformas digitales en toda España, con el objetivo de reconvertir esos inmuebles problemáticos en alquiler permanente para jóvenes y familias.
Los residentes de los destinos turísticos más populares de España atribuyen al auge de los apartamentos turísticos –legales o ilegales– el agravamiento de la crisis de vivienda, que ha forzado a muchos vecinos a abandonar sus localidades de origen debido a la falta de opciones asequibles.
Los alquileres se han disparado un 80% en la última década, muy por encima del crecimiento salarial.
Casi la mitad de los inquilinos españoles destina al menos el 40% de sus ingresos al alquiler y los gastos asociados –una cifra significativamente superior a la media europea, que es del 27%.
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