Un campamento de verano para niñas truncado por un desastre mortal

Camp Mystic, un campamento cristiano para niñas ubicado a las orillas del río Guadalupe en Texas, era un lugar de risas, oración y aventura hace solo unos días.

Entre las niñas estaba Renee Smajstrla, de 8 años, sonriendo de oreja a oreja en una foto tomada esos días, "disfrutando al máximo" con sus amigas. Pero al día siguiente, el campamento que ella y tantas otras adoraban se convirtió en el escenario de una de las peores inundaciones en la historia reciente de Texas.

Renee fue una de las víctimas.
"Ella vivirá por siempre su mejor vida en Camp Mystic", escribió su tío Shawn Salta en Facebook.

Las fotos muestran el impactante después: las literas aún están ahí, cubiertas de lodo y volcadas, restos de un campamento de verano truncado tragicamente. Pertenencias destruidas están esparcidas por los interiores inundados, donde antes las niñas se reunían para estudiar la Biblia y cantar al rededor de fogatas.

Al menos 59 personas han muerto, incluyendo al director Richard "Dick" Eastland y varias campistas. Once niñas y una consejera siguen desaparecidas. Según medios, muchas de las desaparecidas dormían en cabañas cercanas al río, a menos de 150 metros de la orilla.

Camp Mystic, gestionado por la misma familia por generaciones, ofrecía a las niñas crecer "espiritualmente" en un ambiente cristiano. Familias de todo Texas y EE.UU. enviaban a sus hijas cada verano a nadar, remar, montar caballos y forjar amistades.

Pero la belleza del río Guadalupe, que atrae a tantos, también resultó mortal. La crecida llegó con poco aviso, arrasando la zona donde hay unos 20 campamentos juveniles. Aunque Camp Mystic fue el más afectado, las autoridades dicen que el desastre es extenso.

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Cerca de ahí, el campamento femenino Heart O’ the Hills también sufrió inundaciones. Su codirectora, Jane Ragsdale, falleció. Afortunadamente, el campamento no estaba en sesión.

Ahora surgen preguntas: ¿por qué tantos campamentos estaban tan cerca del río? ¿Por qué no se evacuó a tiempo? El congresista Chip Roy pidió no buscar culpables aún: "La gente dirá: ‘Hay que mover estos campamentos, ¿por qué están cerca del agua?’. Pues, están ahí porque es un lugar hermoso".

Mientras continúan las labores de rescate, familias esperan noticias de sus seres queridos. Equipos trabajan sin descanso, algunos en botes, otros entre escombros.

El gobernador Greg Abbott declaró emergencia estatal, y advierten que el número de víctimas podría aumentar.