Zelenskyy admitió que el próximo invierno podría ser “extraordinariamente difícil”. Crédito de la foto: lev radin/Shutterstock
Volodymyr Zelenskyy ha advertido que Ucrania se enfrenta a uno de los momentos más complejos de su historia. El presidente se pronunció después de que el expresidente estadounidense Donald Trump exigiera a Kiev que acepte en cuestión de días un “plan de paz” de 28 puntos respaldado por Estados Unidos, un acuerdo que, según funcionarios ucranianos y europeos, equivale a una capitulación. Trump confirmó el viernes que el próximo jueves, día de Acción de Gracias en Estados Unidos, sería una fecha límite “aceptable” para la firma. Zelenskyy, en un sobrio discurso de diez minutos frente a su palacio presidencial, afirmó que Ucrania se enfrentaba a una elección imposible: salvaguardar la dignidad nacional o arriesgarse a perder un aliado clave en una administración estadounidense que parece determinada a poner fin al conflicto según los términos de Moscú.
La propuesta exige que Ucrania ceda la región oriental del Donbás, reduzca su ejército, renuncie a las armas de largo alcance y abandone sus aspiraciones de ingreso en la OTAN. Trump sugirió en una entrevista con Fox radio que Kiev no podría impedir que Rusia se apoderara militarmente del Donbás e indicó que existía un “calendario agresivo” para la resolución.
También habría amenazado con suspender el intercambio de inteligencia y el apoyo militar si Ucrania no accedía a cumplirlo. Zelenskyy insistió en que jamás sacrificaría la soberanía de Ucrania ni iría en contra de la constitución, declarando: “No traicionamos a Ucrania entonces, y no lo haremos ahora”.
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Los Líderes Europeos Rechazan la Propuesta
Apoyo a la Soberanía
Los líderes europeos expresaron una firme oposición al plan. El presidente francés Emmanuel Macron, el canciller alemán Friedrich Merz, el primer ministro británico Keir Starmer y la jefa de la política exterior de la UE, Kaja Kallas, mantuvieron conversaciones con Zelenskyy en muestra de solidaridad. Subrayaron que cualquier acuerdo de paz debe respetar la soberanía de Ucrania, mantener las líneas territoriales actuales como punto de partida para las discusiones y salvaguardar los intereses a largo plazo de Europa y Ucrania. Kallas advirtió que premiar la agresión sentaría un precedente global “muy peligroso”, mientras que Starmer hizo hincapié en una “paz justa y duradera” basada en la autodeterminación de Kiev.
Tras las deliberaciones con el vicepresidente estadounidense JD Vance, quien ha insistido repetidamente en que Ucrania acepte el acuerdo, Zelenskyy mostró un optimismo cauteloso, afirmando que los negociadores trabajaban en una vía “digna y verdaderamente efectiva” hacia la paz. Ambos países designaron a sus asesores de seguridad nacional para continuar perfeccionando el texto del borrador del plan.
Aumentan las Presiones Internas
Zelenskyy Bajo Tensión
Zelenskyy reconoció que el próximo invierno podría ser “extremadamente difícil”, dado que Rusia ya ha destruido gran parte de la infraestructura energética de Ucrania, dejando a millones de personas sin calefacción ni electricidad. Rindió tributo además a los ciudadanos que soportan “casi cuatro años de invasión a gran escala”, al tiempo que insinuó que podrían ser necesarios algunos compromisos para poner fin al conflicto. “Nuestra gente desea, con todas sus fuerzas, que esta guerra termine. Somos, por supuesto, fuertes, pero hasta el metal más resistente puede quebrarse”, afirmó.
Según fuentes internas, Kiev ha mejorado sus relaciones con Washington desde febrero, cuando Trump y Vance increparon públicamente a Zelenskyy. No obstante, Ucrania corre el riesgo de provocar de nuevo a Trump si no considera con celeridad su acuerdo, redactado por Moscú. En respuesta a las tensiones recientes, Estados Unidos suspendió temporalmente el intercambio de inteligencia y la ayuda militar directa, aunque continúa suministrando sistemas de armas avanzados bajo la iniciativa Purl de la ONU.
Un Plan Redactado Sin Ucrania
Excluidos de las Negociaciones
El plan de 28 puntos fue redactado en Miami por Kirill Dmitriev, enviado ruso, y Steve Witkoff, representante especial de Trump, sin la participación de Ucrania o Europa. Zelenskyy se comprometió a trabajar con serenidad y constructividad con Washington, “ofreciendo alternativas” para garantizar que se protegieran los intereses nacionales. Según los informes, el asesor de seguridad nacional ucraniano, Rustem Umerov, modificó algunos elementos, pero subrayó que Kiev nunca aceptaría términos que violaran su soberanía.
El Kremlin ha recibido una copia del plan. El presidente Vladimir Putin sugirió que podría “sentar las bases” para un acuerdo final, aunque fuentes indicaron que no satisface por completo las exigencias rusas de garantías sobre la OTAN y la neutralidad constitucional. Moscú declaró que sólo consideraría la membresía en la UE si se excluían los componentes militares.
Reacción Pública y de Expertos
Aumentan las Críticas
Las reacciones en Ucrania han sido abrumadoramente negativas, con la sociedad civil y los comentaristas políticos condenando el plan por considerarlo una claudicación. La propuesta también ha suscitado críticas en Europa. Constanze Stelzenmüller, del Instituto Brookings, describió su redacción como “atroz” y “escandalosa”, advirtiendo que podría consolidar el dominio de Rusia en Europa.
Estados Unidos también desplegó a altos oficiales militares, encabezados por el secretario del Ejército, Dan Driscoll, para mantener conversaciones en Kiev, con la expectativa de que posiblemente viajen a Moscú para seguir negociando el plan. Las acciones de Trump subrayan la presión sin precedentes ejercida sobre Ucrania, aumentando los riesgos para el gobierno de Zelenskyy en medio de un escrutinio político interno continuo.
Resumen
Trump exige que Ucrania acepte un plan de paz de 28 puntos respaldado por EE. UU. para Acción de Gracias.
El plan requiere ceder el Donbás, reducir el ejército y abandonar las ambiciones de la OTAN.
Zelenskyy insiste en que debe preservarse la soberanía y dignidad de Ucrania.
Los líderes europeos se oponen al plan, destacando la necesidad de una paz justa y duradera para Ucrania.
Ucrania enfrenta un invierno difícil con su infraestructura energética dañada por Rusia.
El plan se redactó sin Ucrania; el Kremlin lo ve como una base parcial.
La sociedad civil ucraniana y expertos europeos condenan el plan por considerarlo una capitulación.
Implicaciones para Kiev
La propuesta sitúa a Zelenskyy bajo una intensa presión nacional e internacional. El presidente de Ucrania continúa las negociaciones para asegurar un plan que preserve la soberanía y la seguridad a largo plazo, al tiempo que equilibra las relaciones con Washington y sus aliados europeos. Los próximos días son cruciales, y cada decisión podría reconfigurar el rumbo del país en una guerra prolongada donde la supervivencia nacional y la dignidad penden de un hilo.
