Mi noche de caos en Bilbao: Richarlison, lugareños amigables y una operación policial eficiente que mantuvo a salvo a 80,000 aficionados ingleses, pero no pudo mantener los autobuses y trenes en funcionamiento.
Por Jon Clarke en Bilbao A las 5 de la mañana del jueves, cuando los cielos se abrieron en la parada de taxis de la Plaza Moyua en el centro de Bilbao, no fui el único fan maldiciendo la ciudad. Pero mientras la lluvia era predecible, al igual que la larga espera por un taxi, … Leer más