La oficina del presidente palestino Mahmoud Abbas ha instado a Estados Unidos a revertir una decisión de revocar el visado del líder palestino, apenas semanas antes de que este asistiera a la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) en Nueva York.
La presidencia palestina expresó “estupefacción” ante la determinación de Washington, tomada el viernes, de anular los visados de Abbas y otros ochenta funcionarios palestinos en vísperas de las reuniones de alto nivel previstas para el próximo mes en la sede de la ONU.
Abbas ha intervenido en la Asamblea General durante numerosos años y habitualmente encabeza la delegación palestina.
“Hacemos un llamamiento a la administración estadounidense para que revierta su decisión”, declaró el sábado el portavoz de Abbas, Nabil Abu Rudeineh, a The Associated Press, advirtiendo que la medida “no hará sino incrementar la tensión y la inestabilidad”.
“Mantenemos contactos desde ayer con países árabes y extranjeros, en especial con aquellos directamente concernidos por este asunto. Estos esfuerzos proseguirán a lo largo del día”, afirmó Abu Rudeineh.
El portavoz también instó a otras naciones a presionar a la administración del presidente estadounidense Donald Trump para que rectifique su determinación, haciendo hincapié en aquellos países que han organizado una conferencia de alto nivel para revitalizar la opción de los dos Estados.
Programada para el 22 de septiembre, la conferencia está siendo copresidida por Francia y Arabia Saudita.
‘Motivación ideológica’
Las restricciones de visados de la administración Trump se producen en un contexto de creciente condena a la devastadora ofensiva israelí contra los palestinos en la Franja de Gaza, así como de una ola de violencia por parte de colonos israelíes y fuerzas militares en Cisjordania ocupada.
Los ataques letales han impulsado a un número cada vez mayor de países a anunciar planes para reconocer un Estado palestino independiente en la ONU en septiembre.
El Secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, justificó las revocaciones el viernes acusando a la Autoridad Palestina (AP) y a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) de “incumplir sus compromisos” y “socavar las perspectivas de paz”.
Rubio también acusó a la AP de participar en “campañas judiciales”, incluyendo apelaciones ante la Corte Internacional de Justicia y la Corte Penal Internacional para responsabilizar a Israel de los abusos cometidos en Gaza y en Cisjordania ocupada.
No obstante, Matt Duss, vicepresidente ejecutivo del Center for International Policy, un think tank con sede en Estados Unidos, acusó a la administración Trump de “violar flagrantemente el protocolo diplomático” con su decisión de revocar los visados.
Como Estado anfitrión, Estados Unidos está obligado a conceder visados a representantes y funcionarios de Estados miembros de la ONU para asistir a la sede del organismo internacional en la ciudad de Nueva York.
“Lo que ocurre aquí está claramente impulsado por ideología”, declaró Duss a Al Jazeera.
“Hay personas dentro de la administración Trump que colaboran estrechamente con el gobierno de derechas israelí y su objetivo no es otro que eliminar el movimiento de liberación palestino de la agenda internacional”, afirmó.
“No reconocen el derecho del pueblo palestino a tener un Estado, y lo que buscan es impedirlo en el territorio de Palestina y ahora pretenden excluirlos de la agenda internacional en Nueva York”.
Críticas europeas
Mientras tanto, la jefa de política exterior de la Unión Europea declaró que el bloque está solicitando a Washington que reconsidere sus denegaciones de visado.
“A la luz de los acuerdos existentes entre la ONU y su Estado anfitrión, todos instamos a que esta decisión sea reconsiderada”, afirmó Kaja Kallas el sábado tras una reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la UE en Copenhague.
El ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, también señaló que la Asamblea General “no puede tolerar restricción alguna al acceso”.
“La sede de las Naciones Unidas es un espacio de neutralidad, un santuario dedicado a la paz, donde se resuelven conflictos”, añadió Barrot.
Por su parte, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, comunicó que habló con Abbas el sábado para expresarle su “firme apoyo” tras las “injustas” revocaciones de visados.
“Palestina tiene derecho a hacer oír su voz en las Naciones Unidas y en todos los foros internacionales”, escribió Sánchez en una publicación en redes sociales.