Puede que solo haya desempacado las cajas y puesto la tetera en mi nueva vida como residente de tiempo completo en la Costa del Sol, pero que no quepa duda: he tenido una segunda casa aquí durante casi dos décadas.
Suficiente tiempo para darme cuenta de que el sueño soleado está siendo lentamente empañado por una creciente ola de crimen.
Menos ‘vibra de mañana’ y más aguas residuales crudas burbujeando en el Támesis, pero con palmeras.
Como muchos otros británicos cansados, vine a España buscando aire más limpio, menos ladrones y una política que no se sintiera como un episodio de Black Mirror. ¿Pero últimamente? La Costa se ha vuelto un poco Costa Nostra.
¿No me crees? Echa un vistazo a las páginas de crimen del Daily Mail, si aún puedes soportar la lamentable publicación británica.
Imagina mi alegría cuando mi encantadora villa española, mi pequeño rincón de escape, fue mencionada en el Mail, ¡nada menos que como marcador de ubicación para una ejecución de pandillas!
Sí, un pobre hombre fue tiroteado en Mijas, ¡y el periodista amablemente dejó saber a los lectores que sucedió ‘a solo 20 minutos de la villa de Charlie Mullins, el fontanero más rico de Gran Bretaña’! ¡Qué considerado!
Sinceramente, parecía que estaban a punto de dibujar un contorno de escena del crimen afuera de mi puerta principal.
La próxima vez que algo suceda, ¿tal vez mencionen la casa de Lord Sugar o Simon Cowell en su lugar, eh chicos?
Es solo una broma. Me encanta la cobertura. Más o menos.
Dicho todo esto, todavía no estoy colgando el letrero de ‘Se Vende’. España sigue siendo un paso adelante del desastre distópico en el que se ha convertido el Reino Unido en 2025, donde ser asaltado es prácticamente un deporte para los viajeros.
Pero aquí está la parte que realmente me desconcierta: británicos estafando a otros británicos. Es como si trajéramos nuestros propios villanos con nosotros.
Quizás sea el clima cálido, o el sentido de seguridad inducido por la sangría, pero demasiados expatriados dejan su astucia en el Aeropuerto de Málaga y caen directamente en manos de encantadores estafadores con acento británico.
Ya lo hemos visto antes. El imperio de tiempos compartidos dudosos de John Palmer en los años 90, y ahora la vergonzosa estafa de Continental Wealth Management (CWM) – 35 millones de euros estafados en su mayoría a británicos jubilados que pensaban que su dinero estaba seguro en el soleado España.
¿Será el caso del Plan Funerario Ibérico otro que nos sorprenda?
The Olive Press, debo agregar, ha estado pendiente de estas estafas desde el primer día. Mis respetos para ellos.
Y el mes pasado, uno de los principales implicados en CWM, Jody Smart (también conocido como Jody Pearson), fue encarcelado por tres años y medio.
Justicia, hasta cierto punto.
¿Cuál es mi punto en todo esto? Sinceramente, no estoy del todo seguro, excepto para decir: hay manzanas podridas en todas partes, incluso en el paraíso. Así que mantén tus sentidos alerta.
Y si una oferta suena demasiado buena en libras esterlinas o euros… probablemente lo sea.
