El primer ministro de España, Pedro Sánchez, ha pedido a las organizaciones deportivas internacionales que prohíban la participación de Israel en competiciones, diciendo que su trato debería reflejar la exclusión de Rusia después de la invasión de Ucrania en 2022.
Hablando ante su Partido Socialista el lunes, Sánchez dijo que la participación de Israel en eventos globales es incompatible con su ofensiva en Gaza.
“Las organizaciones deportivas deberían considerar si es ético que Israel siga participando en competiciones internacionales. ¿Por qué expulsar a Rusia después de la invasión de Ucrania y no expulsar a Israel después de la invasión de Gaza?”, preguntó. “Hasta que la barbarie termine, ni Rusia ni Israel deberían estar en ninguna competición internacional”.
Sus declaraciones llegaron un día después de que activistas pro-palestinos interrumpieran la etapa final de la Vuelta a España en Madrid, lanzando vallas a la pista en protesta por la participación del equipo israelí Israel-Premier Tech. La policía se enfrentó con manifestantes cerca de la línea de meta, dejando 22 heridos y arrestando a dos personas.
La semana pasada, la ministra de Deportes de España, Pilar Alegría, dijo que los equipos israelíes deberían ser prohibidos en el deporte de la misma manera que los equipos rusos lo fueron en 2022 después de que el país invadiera Ucrania, destacando un “doble rasero”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Gideon Saar, criticó duramente a Sánchez, llamándolo “antisemita y mentiroso”, sin elaborar por qué la crítica a la guerra genocida de Israel en Gaza era antisemita. Israel ha sido acusado de utilizar el antisemitismo como arma para silenciar las críticas a sus políticas contra los palestinos.
El año pasado, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu calificó de antisemita a la Corte Penal Internacional después de que la corte con sede en La Haya emitiera una orden de arresto contra el primer ministro israelí y su ex ministro de Defensa Yoav Gallant por crímenes de guerra.
Las tensiones entre Madrid y Tel Aviv han aumentado en los últimos meses, con la coalición de izquierdas de España apoyando abiertamente a activistas que realizaron manifestaciones durante varias etapas de la Vuelta contra la presencia del equipo israelí.
### Contrato de armas con Israel cancelado
España también estaría planeando cancelar un importante acuerdo de armas con un fabricante de defensa israelí. Según documentos oficiales vistos por AFP, Madrid canceló un contrato valorado en casi 700 millones de euros (824 millones de dólares) para sistemas de cohetes diseñados por la empresa israelí Elbit Systems.
El acuerdo, firmado en octubre de 2023, involucraba la compra de lanzacohetes PULS de Elbit, conocidos en España como SILAM. Su cancelación eleva el valor total de los contratos de armas israelíes anulados por España en los últimos meses a casi mil millones de euros (1.200 millones de dólares). Un acuerdo previo en junio, supuestamente con la compañía de defensa Rafael, también fue detenido.
Ni Elbit ni Rafael han comentado formalmente, aunque el diario israelí Haaretz, que también reportó la cancelación, citó a una fuente diciendo que aún no se había recibido ninguna notificación oficial de cancelación. Ningún gobierno ha confirmado públicamente el movimiento.
Sin embargo, Al Jazeera no pudo verificar independientemente los informes.
Medios españoles reportaron que Madrid está explorando formas de distanciar su industria de defensa de la dependencia de la tecnología israelí. La Vanguardia dijo que los oficiales están estudiando un plan con los principales productores de armas de España para reemplazar los sistemas israelíes afectados por el embargo.
La semana pasada, Sánchez presentó nueve medidas destinadas a aumentar la presión sobre Israel, incluyendo prohibir los derechos de atraque y sobrevuelo para barcos y aviones que transporten armas hacia el país. El primer ministro enmarcó los pasos como parte de la responsabilidad de España de presionar para poner fin a lo que describió como la “barbarie” de Israel en Gaza.
Otras medidas incluyen prohibir las importaciones de los asentamientos israelíes en la ocupada Cisjordania y el compromiso de Sánchez de destinar 10 millones de euros (11,8 millones de dólares) en nueva financiación para la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) y un total de 150 millones de euros (176 millones de dólares) en ayuda humanitaria para Gaza para 2026.