Con la producción de casi 130.000 metros cúbicos de agua potable diarios—suficiente para llenar 50 piscinas olímpicas—, la planta desempeña una función crucial en la vida cotidiana, desde los hogares y escuelas hasta los hospitales y empresas.
Los residentes de decenas de municipios pueden esperar en breve un suministro de agua potable aún más fiable, gracias a una modernización de 2,7 millones de euros en la planta desaladora de San Pedro del Pinatar. Ubicada en El Mojón, junto a las icónicas salinas del municipio, la instalación abastece de agua limpia a la Mancomunidad de los Canales del Taibilla desde 2005, y ahora se prepara para dar un salto digital.
Las mejoras están diseñadas para proteger tanto el suministro de agua como a las personas que dependen de él. Con la producción de casi 130.000 metros cúbicos de agua potable diarios—suficiente para llenar 50 piscinas olímpicas—, la planta desempeña una función crucial en la vida cotidiana, desde los hogares y escuelas hasta los hospitales y empresas.
La modernización incorporará:
- Sistemas de monitorización avanzada para que los operadores detecten y solucionen incidencias antes de que afecten al grifo.
- Ciberseguridad reforzada para proteger frente a posibles ataques informáticos que pudieran interrumpir el suministro.
- Controles automatizados y monitorización por vídeo en tiempo real, otorgando al personal una visión integral del funcionamiento de la planta en todo momento.
Las autoridades insisten en que el proyecto no solo trata de tecnología, sino de la tranquilidad de la ciudadanía. En una era de sequías y cambio climático, cada gota cuenta. Modernizar la planta garantiza que los residentes puedan seguir abriendo el grifo sin preocupación, seguros de que el agua es segura, abundante y fiable.
“Esta mejora fortalece uno de los servicios más esenciales de la región”, afirmaron las autoridades locales. “Se trata de proteger un recurso que atañe a la vida diaria de todos.”
Tras cerca de dos décadas de servicio, la planta desaladora de San Pedro del Pinatar avanza hacia el futuro—combinando tecnología puntera con una fiabilidad centrada en las personas para asegurar el agua a cientos de miles de personas en toda la región.
