La localidad de Alhaurín el Grande permanece sumida en una profunda consternación tras las trágicas muertes de dos adolescentes en un voraz incendio doméstico la mañana de Navidad. Rebeca, de 16 años, y su novio Juan Antonio, de 15, perecieron en el fuego que envolvió una vivienda de dos plantas en la calle San Rafael, transformando lo que debía ser un día de celebración y amor familiar en uno de honda aflicción; una pena que se siente en cada rincón de este pueblo del Valle del Guadalhorce, con alma de aldea.
La joven pareja, ambos estudiantes del instituto IES Antonio Gala, había pasado la Nochebuena cenando y festejando con la familia de Juan Antonio. Hacia las 3:15 de la madrugada, se marcharon para pasar la noche en casa de Rebeca. Solo unas horas después, poco después de las 8:00 del 25 de diciembre, los vecinos fueron alertados por los gritos de auxilio de los jóvenes mientras las llamas consumían la vivienda con rapidez.
El fuege se propagó demasiado rápido para los bomberos
Los bomberos del Consorcio Provincial acudieron lo más pronto posible desde su parque en Coín, a unos 10-15 minutos en coche, pero encontraron dificultades para transitar por las estrechas calles de estilo pueblo blanco. A pesar de sus esfuerzos, la intensidad de las llamas, avivadas por una gran cantidad de material inflamable en la planta baja, impidió que los rescatistas alcanzaran a tiempo el piso superior. La pareja se había refugiado arriba, pero fue hallada sin vida por los equipos de emergencia. Una mascota de la familia también falleció en el suceso.
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Las pesquisas preliminares apuntan a un posible cortocircuito eléctrico como causa, si bien la investigación de la Guardia Civil sigue su curso. La veloz propagación del fuego complicó el acceso y la extinción, provocando daños estructurales, incluido el colapso parcial de la cubierta.
Duelo oficial en Alhaurín
En respuesta, el ayuntamiento ha declarado el 26 de diciembre día oficial de luto, comenzando a las 7:00 horas con las banderas a media asta. El alcalde Antonio Bermúdez se personó en el lugar al conocer la tragedia y expresó la conmoción de la comunidad, prometiendo apoyo a las familias afectadas, incluida ayuda para encontrar una nueva vivienda a la madre de Rebeca.
La pérdida ha conmocionado a esta comunidad cercana de unos 30.000 habitantes. Rebeca y Juan Antonio eran miembros activos de la banda de cornetas y tambores “Boinas Negras”, vinculada a una iglesia local, que expresó su devastación en redes sociales: “Nos hallamos consternados ante el inmenso dolor de esta pérdida doble e inoportuna.”
Su instituto, el IES Antonio Gala, emitió un comunicado sumándose al dolor de las familias: “Hacemos llegar todo nuestro cariño y apoyo en estos momentos tan díficiles. Hoy, el centro está de duelo.”
Alhaurín el Grande permanece en estado de shock y profunda tristeza
Mientras llegan los homenajes, Alhaurín el Grande se une en el dolor, un crudo recordatorio de la fragilidad de la vida en plena temporada festiva. El pueblo se mantiene en solidaridad con las familias enlutadas y con un profundo sentimiento de pérdida que ha tocado a todos durante esta tragedia inimaginable.
Los problemas eléctricos son frecuentes en el casco antiguo de Alhaurín el Grande, donde muchos edificios antiguos conservan instalaciones, fusibles y tomas de tierra de una época en que el consumo eléctrico doméstico era muy inferior. Conforme el miedo da paso a la frustración entre la población, surge la cuestión sobre la idoneidad de un servicio de bomberos compartido con Coín, a 10 kilómetros de distancia.