La batalla en la pista permitió a Norris acercarse a los líderes, después de perder algo de tiempo pasando a los conductores entre él y los primeros lugares.
Norris adelantó a Verstappen superándolo en la curva 11 en la vuelta 17, pero se salió al hacerlo y tuvo que devolver la posición.
Sin embargo, una vuelta más tarde, logró el adelantamiento con facilidad, esta vez Verstappen parecía no molestarse en defenderse después de darse cuenta de que la carrera estaba abierta.
Verstappen rápidamente se alejó de los McLaren, perdiendo nueve segundos en varias vueltas antes de su parada en boxes.
La jornada del Campeón Mundial empeoró cuando se desplegó el coche de seguridad virtual (VSC) durante el periodo de paradas en boxes.
Russell, quien era el único piloto en el top 10 que había comenzado con neumáticos duros al igual que Hamilton, aún no había hecho su parada y ese VSC le permitió cambiar a neumáticos nuevos y unirse aún por delante de Verstappen.
Por un tiempo, Verstappen se acercó a Russell, pero no pudo reducir la brecha a menos de aproximadamente 1.8 segundos antes de dejar de hacer progresos. Más tarde, los comisarios desestimaron una protesta de Red Bull de que el británico no había reducido la velocidad bajo banderas amarillas.
En el frente de la carrera, Norris se acercó a Piastri, pero después de reducir la ventaja a cuatro segundos, el australiano aumentó su ritmo para demostrar que tenía el control y condujo cómodamente hasta el final.
Es la primera vez que un piloto de McLaren gana tres carreras seguidas desde Mika Hakkinen durante las temporadas de 1997-98.
La victoria de Piastri amplía su ventaja en el campeonato sobre Norris a 16 puntos, con Verstappen igualmente detrás en el tercer lugar.