Nueva tecnología promete recuperar miles de cápsulas de aluminio antes perdidas en residuos

Durante años, millones de cápsulas de café usadas y otros pequeños objetos de aluminio han supuesto un reto medioambiental de primer orden, al colarse en los sistemas convencionales de clasificación y terminar como desechos en vez de ser reciclados. Ahora, un nuevo convenio entre la Generalitat Valenciana y Nestlé-Nespresso marca un punto de inflexión, ofreciendo una solución largamente esperada que por fin permitirá recuperar de manera eficiente estos materiales pequeños pero problemáticos en Benidorm.

Acuerdo regional para impulsar la recuperación del aluminio

La Generalitat Valenciana ha firmado un acuerdo con Nestlé-Nespresso para desplegar un proyecto destinado a mejorar la recuperación de pequeños objetos de aluminio en la Planta de Clasificación de Envases Ligeros de Benidorm, gestionada por la empresa pública Vaersa. Esta iniciativa, presentada durante la Semana Europea de la Prevención de Residuos, se enmarca en la estrategia regional para avanzar hacia un modelo de economía circular y transformar los residuos en recursos valiosos.

Nuevo sistema para capturar objetos de difícil reciclaje

Durante la presentación, el secretario autonómico de Medio Ambiente y Territorio, Raúl Mérida, explicó que el proyecto permitirá separar y reciclar cápsulas de café, tapones de botella, tapas de yogur y otros pequeños envases de aluminio y plástico que los ciudadanos depositan en los contenedores amarillos. Una vez clasificados, estos materiales se enviarán a instalaciones especializadas para garantizar su correcto reciclaje.

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Un plan alineado con las estrategias de residuos autonómica y estatal

La iniciativa se alinea con el Plan Integral de Residuos de la Comunidad Valenciana (PIR-CVA 2019), que será sustituido por un nuevo marco en los próximos meses, así como con las directrices del Plan Estatal de Gestión de Residuos 2024-2035 (PEMAR). El acuerdo tambíen se sustenta en una colaboración previa entre Vaersa y Nestlé en la planta de Picassent, donde se obtuvieron resultados prometedores en la separación de fracciones pequeñas de aluminio.

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Tecnología avanzada para asegurar altas tasas de recuperación

Según Mérida, la planta de Benidorm procesará inicialmente materiales del contenedor amarillo de Benidorm y Alicante, con la posibilidad de incorporar otros municipios posteriormente. Para potenciar las tasas de recuperación, el proyecto incluye la instalación de un separador por corrientes de Foucault, una tecnología con la que se espera alcanzar índices de captura superiores al 75% y niveles de pureza cercanos al 90% en el material recuperado.

Concienciación ciudadana y seguimiento continuo

El acuerdo también prevé una campaña de concienciación ciudadana para fomentar la correcta disposición de estos objetos y evitar la pérdida de materiales valiosos en la fracción de rechazo. Además, se creará una comisión de seguimiento que se reunirá trimestralmente durante el primer año y semestralmente a partir de entonces, para evaluar los avances técnicos y operativos del proyecto.