El NHS va a incrementar la cantidad que gasta en medicamentos en respuesta a las críticas de las compañías farmacéuticas que dicen que el Reino Unido se está volviendo menos competitivo, según dijo el ministro de ciencia Lord Vallance a los parlamentarios.
Tres de las empresas más grandes del mundo, Merck, AstraZeneca y Eli Lilly, han pausado o cancelado inversiones por un valor de casi 2 mil millones de libras este año. Esto pasa durante unas negociaciones tensas entre la industria y el gobierno sobre los precios de los medicamentos.
Al hablar en una sesión de emergencia del comité de ciencia, tecnología e innovación, Lord Vallance admitió que los precios bajos que históricamente ha pagado el NHS, junto con la presión del presidente estadounidense Donald Trump para reducir precios para los consumidores en EE.UU., han hecho que el Reino Unido sea menos atractivo para la industria.
“Estoy profundamente preocupado de que haya habido una disminución de 10 años en la inversión de apoyo a una industria vital; vital para la economía, vital para los pacientes y vital para el NHS en un momento en que los medicamentos están haciendo una contribución más grande que nunca.
“Creo que el NHS gastará un porcentaje mayor de su presupuesto en medicinas. Todo esto se trata de compensaciones, y la compensación que se ha hecho durante la última década ha sido [gastar] un porcentaje menor en medicinas. Ahora estamos cosechando las consecuencias de eso de una manera muy urgente, y eso es lo que tenemos que abordar ahora.”
Los comentarios de Lord Vallance surgieron después de que ejecutivos de la industria advirtieran a los parlamentarios que el compromiso del Reino Unido con las ciencias de la vida enfrenta un “desafío de credibilidad” y está perdiendo inversiones frente a competidores como Alemania, Irlanda y Singapur.
Ben Lucas, el director general de la gigante farmacéutica Merck en el Reino Unido, que la semana pasada canceló una inversión de investigación de mil millones de libras en Londres, dijo que la decisión se tomó en parte debido a la dificultad “de principio a fin” de hacer negocios en el Reino Unido.
“Este es un desafío de credibilidad. La realidad es que hemos tenido, con gobiernos sucesivos, esta conversación continua sobre el potencial del Reino Unido. Pero desde el punto de vista de un equipo ejecutivo con base en EE.UU., escucho: ‘Ya hemos escuchado este plan antes, pero no necesariamente se ha cumplido’.”
Tom Keith-Roach, el presidente de AstraZeneca en el Reino Unido, que ha pausado o cancelado 650 millones de dólares de inversión en los últimos meses, dijo: “El Reino Unido es un lugar cada vez más difícil para impulsar esa innovación, para entrar por la puerta principal… del NHS, para llegar a los pacientes y mejorar sus vidas.
“Lo que estamos viendo globalmente es que la inversión discrecional en I+D está fluyendo hacia países que parecen valorar la innovación y la llevan a los pacientes. Es cada vez más difícil llevar esa inversión a un entorno que aparentemente no lo hace.”
La industria quiere que el umbral para permitir que nuevos medicamentos entren en el NHS aumente desde el actual £20,000-£30,000, que no ha cambiado desde 1999, y que se incremente un presupuesto general de medicamentos que ha caído en términos reales un 11% en una década.
También quiere una reducción en los complejos acuerdos de “devolución” que regulan los precios de los medicamentos, que este año harán que la industria devuelva el 23% de los ingresos totales al NHS, aproximadamente cuatro veces más que esquemas comparables en Europa.
Lord Vallance dijo que las discusiones con la industria sobre reformar los acuerdos de devolución continúan, a pesar de que las negociaciones formales terminaron sin acuerdo a principios de este año.