Algunas personas son mejores para resistir las tormentas de la vida que otras. Mientras que factores como la genética, la crianza y las habilidades de afrontamiento juegan un papel en la resiliencia al estrés, los científicos están descubriendo un jugador inesperado en esta compleja ecuación: los billones de microorganismos que residen en tu intestino.
De hecho, la investigación sugiere que la composición de tu microbioma intestinal, la vasta comunidad de bacterias, hongos y otros microbios que habitan en tu tracto digestivo, puede influir en cómo respondes al estrés. Este campo emergente de estudio está revelando conexiones intrincadas entre tus microbios intestinales y tu estado mental, ofreciendo nuevas ideas sobre el manejo del estrés y la salud mental.
La conexión cerebro-intestino: una nueva frontera en la comprensión de la resiliencia al estrés
La investigación publicada en Nature Mental Health descubrió una relación fascinante entre nuestro cerebro, intestino y los diminutos microbios que llaman hogar a nuestros intestinos. Este sistema interconectado, conocido como el microbioma cerebro-intestino (BGM), desempeña un papel crucial en tu salud mental y tu capacidad para manejar el estrés.
El desequilibrio del microbioma intestinal contribuye a trastornos neuropsiquiátricos
Cuando se altera el equilibrio de tus bacterias intestinales, una condición conocida como disbiosis, puede hacerte más vulnerable a problemas de salud mental y trastornos psiquiátricos. La disbiosis está vinculada a la ansiedad, la depresión y el trastorno bipolar, por ejemplo.
La función mitocondrial es clave para una suplementación exitosa con Akkermansia
Además de seleccionar un suplemento de alta calidad, otra clave para una suplementación exitosa con Akkermansia es trabajar simultáneamente en la función mitocondrial. Como se mencionó, cuando tu energía celular disminuye, tu cuerpo lucha por eliminar eficazmente el oxígeno de tu colon. Esto tiene graves consecuencias para los habitantes normales de tu colon, que pueden morir cuando los niveles de oxígeno aumentan. Esta es la razón por la cual la suplementación con Akkermansia sola no es una solución completa.
Es crucial comprometerse con un programa diseñado para disminuir las toxinas mitocondriales y optimizar la producción de energía celular. Esto se debe a que la función mitocondrial reducida debe compensarse para garantizar que el oxígeno pueda ser eliminado del colon. Si no abordas este problema, incluso el mejor suplemento de Akkermansia con el sistema de entrega más efectivo tendrá beneficios limitados.
Una vez más, esta es una de las principales razones por las que es vital eliminar todos los aceites de semilla de tu dieta durante al menos seis meses antes de comenzar un programa de suplementación con Akkermansia. Este período preparatorio permite que tu cuerpo recupere la función mitocondrial y cree un ambiente más hospitalario en tu colon para las bacterias beneficiosas.
Al tomar estos pasos, maximizas los beneficios de la suplementación con Akkermansia y apoyas la salud intestinal en general. Recuerda, abordar la causa raíz, la función mitocondrial y la oxigenación del colon, es esencial para el éxito de cualquier intervención en la salud intestinal.
