Matheus Cunha llega con su sonrisa grande normal, se presenta a todos para la entrevista y empieza a hablar de fútbol tranquilamente.
Pasamos unos minutos antes de grabar – no quieres interrumpir su emoción cuando empieza una conversación. Las noticias en la tele del futuro traspaso de Eberechi Eze al Arsenal, sus primeras semanas en el Manchester United, problemas tácticos… todo eso antes de que nuestro equipo grábara. La personalidad vibrante de Cunha es la primera impresión que recibes de él.
“Creo que fuera del campo siempre intento ser yo mismo”, nos dice a Sky Sports. “Un chico humilde y divertido. Intento hablar con todos y respetar a todos, y siempre pienso en aprender de cada persona.”
“Pero cuando voy al campo, siempre sé por qué estoy aquí. Siempre recuerdo todas las cosas difíciles que me hicieron ser este hombre. Esas cosas no pueden jugar en mi contra, tienen que jugar conmigo. Siempre intento controlar la psicología. ¡No es fácil! Pero siempre lo intento.”
La energía y fuego que Cunha muestra en el campo ayudó a que tuviera un buen debut con el Manchester United contra el Arsenal, cuando hizo cuatro tiros y cuatro regates y fue posiblemente su mejor jugador. Suficiente para emocionar a los aficionados y quitar las preocupaciones de algunos, que se sorprendieron cuando firmó por su historial disciplinario reciente.
La temporada pasada, con el Wolves, perdió cinco partidos por dos suspensiones diferentes. La primera, de dos partidos, después de que se descubriera que actuó de una “manera incorrecta” tras una discusión con un miembro del staff del Ipswich en diciembre.
La misma acusación pasó en marzo, ganando otra suspensión de tres partidos por golpear al defensa Milos Kerkez tres veces en un partido de la FA Cup contra el Bournemouth.
¿Qué piensa de la gente que dice que tiene mal genio? “Honestamente, no me importa mucho”, responde. “Creo que todo lo que hice en el juego fue por amor al fútbol.”
“Soy muy apasionado para ganar partidos, para mejorar a mi equipo y a mí mismo para lograr cosas. Creo que dentro de mí siempre creo en algo más.”
“Y cuando traigo esto al United ahora, es algo que me empuja hacia adelante. Claro que podemos cometer errores, y yo cometí algunos. Lo siento, pido disculpas por eso. Pero siempre es con buena intención.”
“Siempre intento hacer algo bueno, y a veces me paso un poco. Nunca pongo me en situaciones para que la gente cuestione mi carácter, porque dentro de mí sé quién soy.”
Cuando le preguntan si es el tipo de jugador que le gusta jugar al límite, responde rápido: “Sí, honestamente. Todo el mundo habla de la presión en este club, pero yo siempre he querido estar aquí.”
“Claro, entiendo que es uno de los clubs más grandes del mundo. La presión es grande, pero siempre intento sentir la presión como un privilegio. Soñé con venir aquí, y ahora que estoy aquí, no puedo poner la excusa de que hay demasiada presión, sabes. Es un privilegio.”
Estamos en la recepción del campo de entrenamiento renovado del Manchester United. Detrás de nosotros hay réplicas de algunos de los trofeos más importantes que el club ha ganado – un club que él veía en Brasil cuando era niño.
“Intento no mirar los trofeos”, se ríe. “Espero que pueda construir mi historia aquí con estos jugadores.”
Ya ha sido un camino largo para el joven de 26 años. Una de las dificultades que mencionó que ayudó a formar su personalidad fue salir de Brasil tan joven para hacerse futbolista profesional.
A la edad de 18 años, después de jugar en la academia del Coritiba FC, lo descubrió el Sion y se mudó a Suiza para firmar su primer contrato profesional.
Después, jugó en el RB Leipzig, Hertha Berlin y Atlético Madrid, hasta que se unió al Wolves en 2023.
El fútbol europeo lo formó como jugador, y dice que le ayudó a desarrollar más conciencia táctica y a mejorar su físico. De niño, jugaba mayormente como 10, pero durante su carrera también tuvo etapas exitosas como delantero centro.
Su versatilidad, junto con su record de goles, atrajo al Man Utd, y parece contento de jugar como uno de los mediocentros ofensivos de Ruben Amorim.
“Es algo sobre lo que Ruben, cuando me trajo aquí, habló mucho”, revela. “Creo que mi posición perfecta para jugar es por el medio, un poco entre el mediocampo y el delantero.”
“Osea, un 10, creo que esta es la posición que es más fácil de entender, detrás del delantero, donde puedes crear mucho más espacio. Esta es la posición para la que me trajeron aquí, es un lugar donde me siento cómodo, y espero poder aportar creatividad al equipo.”
Durante su etapa en Europa, también trabajó en sus idiomas. Además de su portugués nativo, habla inglés, español, francés, y también un poco de alemán e italiano – cinco en total, porque: “¡Si juntas mi alemán y mi italiano, cuenta solo como uno!”
Son, por supuesto, herramientas importantes para comunicarse con compañeros y con una respetable lista de managers, incluyendo a Julian Nagelsmann, Ralf Rangnick y Diego Simeone.
Siempre habla con cariño de Gary O’Neil en el Wolves y de cómo le ayudó a desarrollarse en diferentes posiciones. Luego está Amorim, quien jugó un papel importante en su llegada a Manchester.
“Ruben es alguien que me ayudó mucho a venir aquí, explicándome cómo sería mi posición, cómo puedo aportarle algo que él quiere”, dice. “Me siento muy adaptado, muy cómodo. Es alguien que siempre me empuja hacia adelante.”
“Me encanta tener a alguien que me presione un poco más. Nunca peleamos, pero tenemos, como, algunas conversaciones cuando yo digo algo, y luego ellos dice ‘no, es de esta manera’ y yo entiendo y sigo adelante!”
“Es alguien que puede empujar a los jugadores hacia adelante, y creo que esta es la mejor cualidad en un manager. Poner a los jugadores en posiciones y mostrar las cualidades de cada uno.”
Después de la entrevista, Matheus se queda un rato más charlando. Bruno Fernandes aparece y bromea con el nuevo fichaje. Luego se para a hablar con más gente en el campo de entrenamiento antes de irse y poner su atención otra vez en el Fulham, este domingo.
Sonriendo, bromeando, y luciendo cómodo dentro y fuera del campo con la esperanza de aportar fuego, energía y goles a este Manchester United.
