Actualmente, hay 9.296 personas inscritas en la lista de espera de vivienda social del Govern balear, de las cuales 6.032 se encuentran en Mallorca. Las inscripciones en la agencia de vivienda Ibavi han aumentado en torno a un 20% desde el año pasado; el incremento en los últimos cuatro años ronda el 50%.
El gobierno reconoce las dificultades a las que se enfrentan aquellas personas que, aun teniendo empleo, se han quedado sin opciones para acceder a una vivienda debido al imparable incremento de los precios. E Ibavi puede, de manera no intencionada, contribuir a este encarecimiento. La agencia ha constatado que cada vez que se anuncia un nuevo proyecto de vivienda protegida, se producen subidas de precios en los municipios donde esta se planea construir.
La vivienda pública es un pilar fundamental del plan de emergencia del ejecutivo, con aproximadamente 900 viviendas de protección pública en promociones de Ibavi actualmente en trámite. Esta cifra irá en aumento, ya que se está avanzando en nuevos proyectos en colaboración con los distintos ayuntamientos.
“Construir, construir y construir”, afirmó la presidenta Prohens la semana pasada. El gobierno utiliza las cifras de Ibavi para respaldar su argumento de que la creación de nuevos desarrollos de vivienda es esencial como elemento clave para resolver el problema.
Todo el plan de emergencia de vivienda deja claro que esta debe construirse para los residentes de las Islas Baleares. Existe un requisito de cinco o más años de empadronamiento en la comunidad, dándose preferencia a los vecinos del municipio donde se edifique. El crecimiento poblacional, ha señalado el gobierno, es una de las causas de la presión sobre la vivienda asequible. El gobierno ha incorporado un procedimiento en su ley de liberalización de suelo para agilizar la tramitación de todas las promociones de vivienda pública. Esto acortará los tiempos de construcción.