El sector universitario español ha advertido que los nuevos requisitos incluidos en la reciente Ley de Inmigración podrían impedir que miles de estudiantes estadounidenses cursen estudios en España.
Según las advertencias del ámbito universitario, el proceso de solicitud para estudiantes norteamericanos que desean estudiar en universidades españolas podría caer en un “caos enorme” debido a las nuevas exigencias.
El sistema de tramitación de visados en los consulados españoles en EE.UU. se ha complicado por las modificaciones normativas incluidas en la nueva Ley de Extranjería.
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El cambio en los criterios para los documentos que deben presentar los estudiantes de Estados Unidos que quieren venir a España por un año académico o un trimestre de intercambio, así como los plazos para entregar informes médicos y seguros de salud, ya ha provocado que decenas de solicitudes se congelen o rechacen, según varios medios españoles.
La Asociación de Programas Universitarios Norteamericanos en España (APUNE), en la que participan tanto universidades estadounidenses como cincuenta universidades españolas públicas y privadas, ha enviado esta semana una carta a los ministerios de Asuntos Exteriores, Justicia, Educación, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones para solicitar “una moratoria razonable para aplicar los nuevos requisitos” para obtener un visado de estudiante.
En declaraciones a la agencia Efe, la asociación señaló que la nueva normativa “impediría la exclusión de miles de futuros estudiantes internacionales, ya que la situación es crítica” y “podría reducir entre un 30-50% el número de estudiantes americanos el próximo año.”
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El último estudio de APUNE reveló que cada año se tramitan más de 20,000 visados para estudiantes universitarios estadounidenses en España, cuyo impacto económico supera los 600 millones de euros anuales.
La nueva Ley de Inmigración entró en vigor el 20 de mayo y, entre otras medidas, modificó los plazos para presentar informes académicos, seguros médicos y comprobantes de alojamiento. Según APUNE, los requisitos son ambiguos y, en muchos casos, difíciles de cumplir, pues exigen el pago previo de matrículas, pero muchas universidades españolas no cobran hasta septiembre.
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El colectivo también señala interpretaciones dispares de las directrices entre consulados y advierte que la empresa contratada para gestionar las solicitudes agrava la confusion al haber rechazado citas confirmadas por falta de documentación.
No obstante, un portavoz del Ministerio de Migraciones afirmó que no hay constancia de denegaciones de visados en el breve plazo desde que entraron en vigor los nuevos requisitos: “La implementación de cualquier normativa, y más aún del alcance de la Reloex, genera multitud de situaciones donde entran en juego normativas de terceros países. Por ello, la Secretaría de Estado de Migraciones trabaja en un borrador de instrucciones para aplicar uniformemente este tipo de autorizaciones.”
El portavoz añadió que en las instrucciones “se establecerá que, cuando el plazo de pago y formalización de la matrícula establecido por la institución no coincida con el procedimiento de solicitud, se podrá presentar un documento que acredite dicha situación y el compromiso de pago.”
Esto sin perjuicio de que el órgano competente verifique posteriormente que el solicitante ha cumplido el requisito mediante el pago y formalización de la matrícula o documento equivalente.”