Pallab Ghosh
Corresponsal de ciencia
NASA/Johns Hopkins
La forma de corazón en Plutón fue capturada por una nave espacial que será apagada en medio de la misión si se aprueban los recortes de la NASA.
La pelea entre Donald Trump y Elon Musk por un proyecto de gasto importante ha aumentado la incertidumbre sobre el futuro del presupuesto de la NASA, el cual enfrenta recortes profundos.
La agencia espacial ha publicado su solicitud de presupuesto al Congreso, que reduciría el financiamiento para proyectos científicos casi a la mitad.
Cuarenta misiones científicas, que están en desarrollo o ya en el espacio, podrían ser canceladas.
El presidente ha amenazado con retirar los contratos federales con la compañía de Musk, SpaceX. La NASA depende de los cohetes Falcon 9 de SpaceX para abastecer la Estación Espacial Internacional con tripulación y suministros. También espera usar el cohete Starship para enviar astronautas a la Luna y, eventualmente, a Marte.
El Dr. Simeon Barber, científico espacial de la Open University, dijo que la incertidumbre tiene un "efecto paralizante" en el programa espacial humano.
"Los intercambios sorprendentes, decisiones rápidas y cambios de rumbo que hemos visto esta semana debilitan las bases sobre las que construimos nuestras ambiciones.
La ciencia y exploración espacial dependen de planificación a largo plazo y cooperación entre gobiernos, empresas e instituciones académicas."
BBC News
Además del conflicto entre el presidente y Musk, hay preocupación por los grandes recortes propuestos por la Casa Blanca al presupuesto de la NASA.
Todos los sectores enfrentarían ahorros, excepto el plan para enviar astronautas a Marte, que recibió 100 millones de dólares adicionales.
Según Casey Dreier, de la Sociedad Planetaria, estos recortes serían "la mayor crisis en la historia del programa espacial estadounidense."
La NASA afirma que reducir su presupuesto casi un 25% "alinea sus prioridades con las misiones esenciales para explorar la Luna y Marte."
El Dr. Adam Baker, analista espacial, dijo que si el Congreso aprueba los recortes, cambiaría radicalmente el enfoque de la agencia:
"Trump quiere que la NASA haga dos cosas: llevar astronautas a la Luna antes que China y plantar una bandera en Marte. Todo lo demás es secundario."
NASA
Varias misiones para monitorear el medio ambiente terrestre podrían cerrarse.
Los críticos dicen que la NASA se ha vuelto una burocracia lenta y derrochadora, mientras que sus defensores afirman que estos recortes le dan un propósito claro por primera vez desde los años 60.
Un ejemplo es el cohete SLS, cuyo costo por lanzamiento supera los 4 mil millones de dólares. En cambio, el Starship de SpaceX costaría unos 100 millones por lanzamiento, ya que es reutilizable.
Bajo la propuesta de la Casa Blanca, el SLS sería reemplazado por el Starship y el New Glenn de Blue Origin. Pero el Starship ha tenido fallos en sus últimos lanzamientos, y Blue Origin apenas comienza a probar su cohete lunar.
"El riesgo es que la NASA salga de la sartén para caer en las brasas," advierte el Dr. Barber.
Además, 40 misiones para explorar otros planetas y estudiar el cambio climático desde el espacio están en peligro, muchas en colaboración con otros países.
También están en riesgo dos proyectos con la Agencia Espacial Europea: traer muestras de Marte y enviar su rover Rosalind Franklin al planeta rojo.
El profesor Martin Sweeting dijo que esto podría obligar a Europa a ser más independiente en su programa espacial.
A corto plazo, sin embargo, hay más desventajas: menos acceso a la Estación Espacial y recortes en el Lunar Gateway, su sucesor planeado.
NASA
Los programas de observación terrestre también enfrentan recortes.
"Son nuestra alarma temprana contra el cambio climático. Si los apagamos, será un futuro aterrador," dijo el Dr. Baker.
El Congreso aún debe aprobar el presupuesto. Algunos republicanos podrían votar en contra de los recortes, pero podría haber bloqueo político. Si no se llega a un acuerdo, el presupuesto reducido entraría en vigor como medida temporal, lo que sería difícil de revertir.
Una vez que las misiones se cancelan, es casi imposible reactivarlas.