Una mujer de 71 años se encuentra bajo investigación tras hallarse en su domicilio de la ciudad de Valencia 32 piezas talladas en marfil de elefante.
La acusada enfrenta cargos por tráfico de fauna y contrabando.
Los objetos habían sido puestos a la venta a través de internet y se estimó que el daño causado a la fauna equivalía a 3,6 millones de euros.
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La Guardia Civil tuvo conocimiento de esta traficante mayor en octubre, como parte de sus investigaciones en curso sobre personas que comercian con especies protegidas.
La Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) establece normativas que protegen a más de 40.000 especies de animales y plantas para prevenir su explotación.
Los agentes descubrieron que las 32 piezas que se ofertaban carecían de la certificación CITES, la cual es obligatoria para su venta.
Los objetos, todos ellos tallados con caracteres y escenas de origen oriental, fueron incautados y remitidos a especialistas para su análisis.
Un informe ha sido remitido a un juzgado de Valencia, que será el encargado de procesar los cargos contra la vendedora.
En agosto, la Guardia Civil registró una tienda de antigüedades en Valencia y intervino 127 objetos de marfil de elefante, una de las mayores incautaciones de este tipo en España.
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