La huelga del viernes en los tres aeropuertos baleares por parte de los trabajadores de handling de Azul Handling tuvo un impacto mínimo. Los retrasos registrados no fueron ajenos a lo habitual en un puente festivo de mediados de agosto.
El sindicato convocante, la UGT, atribuyó la escasa afectación a los refuerzos de personal contratados por la empresa durante los tres tramos horarios de paro. “Como era de esperar, Azul Handling sigue burlando los derechos laborales de la plantilla e ignorando lo dispuesto por la ley sobre el derecho constitucional a la huelga.” Según el sindicato, los turnos del viernes se reajustaron “con solo dos o tres horas de antelación”. Algo que, añaden, “está totalmente prohibido”.
La UGT también denunció que todos los vuelos durante los tres períodos estuvieron “protegidos”, sin diferenciar entre conexiones esenciales y no esenciales. Esto, afirma el sindicato, se hizo para maximizar las opciones según los servicios mínimos fijados por el ministerio de Transportes. Alegan, además, que se impidió el acceso a los puestos de trabajo a miembros del comité de huelga y que no se les informó sobre los refuerzos.
“La empresa está incumpliendo la ley y actúa deliberadamente para neutralizar la huelga y amedrentar a los trabajadores. Alguien en las autoridades debería tomar medidas para evitar que este tipo de compañías vulneren la legislación vigente.”
Otro factor a tener en cuenta es que la UGT no es el sindicato mayoritario. Lo es CCOO, que no ha secundado la huelga.
Los horarios afectados fueron de 5 a 9h, 12 a 15h y 21 a 24h. Estos mismos intervalos se repetirán el sábado y domingo, cuando está prevista una huelga de 24 horas de los empleados de Menzies. Azul Handling presta servicio a Ryanair. Menzies opera con varias aerolíneas, como easyJet.
