Los últimos ocho días han sido intensos para Lando Norris y sus posibilidades en el campeonato. Con adelantamientos increíbles en Imola y una pole position espectacular en Mónaco bajo mucha presión de Charles Leclerc, Oscar Piastri, Lewis Hamilton y Max Verstappen, demostró su clase. Después, tuvo una carrera casi perfecta para ganar, a pesar del caos en las calles de Mónaco.
Ahora solo hay tres puntos entre él y su compañero de equipo, Piastri, al terminar el primer tercio de la temporada. Piastri tuvo un fin de semana un poco loco, chocando contra las barreras en la práctica y diciendo que golpeó más veces en un fin de semana que en toda su carrera. Aún así, logró otro podio, y si no fuera por un error en Melbourne, habría estado en el podium en todas las carreras esta temporada.
Leclerc llegó diciendo que su auto era malo en curvas lentas y advirtió "no apuesten por mí". Pero lideró todos los entrenamientos, perdió la pole por poco y terminó segundo, como suele pasar en Mónaco.
Verstappen tuvo problemas con su Red Bull en los bordillos, pero igual manejó como siempre. Empezó cuarto porque Hamilton lo bloqueó sin querer en la clasificación, y luego bajó al séptimo lugar por una penalización. Hamilton tuvo un papel de equipo en la carrera y terminó frustrado en quinto.
Hace décadas se sabe que en Mónaco el orden de la clasificación decide la carrera, a menos que llueva o haya banderas rojas. En 1992, Nigel Mansell no pudo pasar a Ayrton Senna aunque tenía neumáticos mejores. Yo terminé quinto ese año y recuerdo lo difícil que era. Antes podías pasar si alguien fallaba un cambio, pero ahora eso no pasa.
El año pasado, un accidente en la primera vuelta causó una bandera roja. Todos cambiaron neumáticos sin perder tiempo y luego corrieron hasta el final. Para mejorar el espectáculo, este año decidieron que todos hicieran dos paradas y usaran tres juegos de neumáticos secos, incluso si llovía.
Pero algunos equipos usaron un auto lento para ayudar al otro a hacer su parada. Racing Bulls y Williams frenaron mucho a uno de sus autos, lo cual fue un poco alarmante. Pero no se les puede culpar, ya que ambos metieron sus dos autos en los puntos.
Mercedes tuvo una estrategia rara. Russell y Antonelli quedaron atrás después de problemas en la clasificación. Russell perdió la paciencia y cortó una curva para adelantar, recibiendo una penalización.
Al final, la regla de dos paradas no cambió casi nada. Hamilton adelantó a Hadjar en las paradas, Alonso abandonó por fallas, y Ocon tuvo una gran carrera en séptimo lugar con Haas.
El experimento no funcionó. Monaco es especial por su clasificación, no por las carreras. La pista no permite adelantamientos fáciles, y no hay espacio para cambiarla. Quizás la solución es dar a cada piloto una "carta comodín" para cortar una curva una vez, como hizo Russell.
Al final, McLaren, Ferrari y Red Bull dominaron sin problemas. Norris aguantó la presión de Leclerc y marcó la vuelta rápida al final. La próxima parada es el GP de España, un desafío totalmente diferente.
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