La presidenta de les Illes Balears, Marga Prohens, ha dirigido una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la que manifiesta su malestar con los planes del Ministerio de Defensa para crear un depósito de bombas y misiles en la base aérea de Son Sant Joan.
En la misiva, Prohens expresa su “sorpresa” por haberse enterado a través de los medios del proyecto y de las intenciones “de construir un almacén para bombas, explosivos y armamento nuclear para el Ejército del Aire”. Con esta petición de información a Sánchez, Prohens se suma a las quejas vertidas por el portavoz del Govern balear, Antoni Costa, y por formaciones políticas como Més.
Aunque recalca su “absoluta comprensión de las necesidades de la Aviación y de nuestro país en materia de defensa, máxime en el contexto actual que exige garantizar la seguridad de la ciudadanía frente a amenazas externas”, Prohens lamenta que “la planificación de esta instalación, cuya necesidad y pertinencia no pongo en duda, se haya llevado a cabo sin contactar ni informar previamente a mi Gobierno, al Consell de Mallorca o al Ajuntament de Palma”.
Admitiendo que se trata de una “infraestructura crítica y sensible” e “indudablemente, una cuestión de Estado”, insiste, no obstante, en que las autoridades autonómicas deberían haber sido informadas “de primera mano para conocer sus implicaciones, especialmente en lo que respecta a las garantías de seguridad y a las actuaciones previstas en caso de emergencia, y no habernos enterado por la prensa”.
Prohens concluye: “Confío en que recibiremos información de primera mano sobre esta instalación militar por parte del Gobierno, y concretamente del Ministerio de Defensa, a la mayor brevedad”.
Los trabajos del depósito de misiles, que contará con una parte subterránea, tienen prevista su finalización para el próximo verano. Las operaciones del Ejército del Aire en Son Sant Joan se destinan actualmente a labores de búsqueda y rescate y de vigilancia marítima. El Aeropuerto de Palma (Son Sant Joan) fue una base militar antes de operar vuelos comerciales; la base está claramente separada de las operaciones comerciales, pero se ubica en el mismo recinto.