Autoridades españolas detuvieron este lunes al exalto cargo del Partido Socialista Santos Cerdán en un caso de corrupción que supone un nuevo golpe para el primer ministro de izquierdas Pedro Sánchez, según fuentes judiciales.
El exministro de Transporte José Luis Ábalos también está implicado en la investigación sobre sobornos en contratos públicos, creando la mayor crisis política que Sánchez ha enfrentado desde asumir el cargo en 2018.
Las fuentes indicaron que un juez del Tribunal Supremo ordenó la detención de Cerdán, quien recientemente dejó su puesto como secretario de organización del PSOE —tercera posición más alta del partido—, ante el "riesgo" de que intentara huir o destruir pruebas.
Se encuentra en prisión sin fianza acusado de corrupción, blanqueo de capitales y asociación ilícita, según las mismas fuentes.
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Cerdán negó las acusaciones en una audiencia con el juez instructor, alegando ser víctima de una conjura política.
Sánchez ha intentado distanciar al partido del escándalo, relacionado con presuntas irregularidades en la compra de material sanitario durante la pandemia.
"El PSOE actuó con firmeza desde el principio", declaró el presidente. "Santos Cerdán fue expulsado" cuando salieron a la luz las revelaciones, añadió en una conferencia en Sevilla.
Un informe policial menciona grabaciones de audio que sugieren pagos a Cerdán a cambio de contratos públicos adjudicados irregularmente.
Ábalos, exbrazo derecho de Sánchez, y su asesor Koldo García también están bajo investigación.
El presidente ha pedido disculpas y negado tener conocimiento del presunto esquema, pero la oposición exige su dimisión.