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El Primer Ministro de Qatar, Sheikh Mohammed bin Abdulrahman al-Thani, dijo al consejo que Israel estaba "liderado por extremistas bravucones".
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha condenado los ataques de Israel contra un complejo residencial en la capital de Qatar, Doha, que tenían como objetivo a altos miembros de Hamas.
La declaración, que no nombró directamente a Israel, fue apoyada por los 15 miembros del Consejo de Seguridad, incluyendo a EE.UU., que tradicionalmente bloquea las acciones en contra de su aliado cercano.
"Los miembros del Consejo subrayaron la importancia de la desescalada y expresaron su solidaridad con Qatar", decía la declaración, redactada por el Reino Unido y Francia. Israel defendió su decisión de realizar el ataque.
Qatar ha jugado un papel clave en los esfuerzos diplomáticos para poner fin a la guerra entre Israel y Gaza, sirviendo como mediador en las negociaciones indirectas entre Hamas e Israel.
Ha alojado la oficina política de Hamas desde 2012 y es un aliado cercano de EE.UU., albergando una gran base aérea estadounidense en el desierto al suroeste de Doha.
La reunión de emergencia fue solicitada por Qatar, Argelia, Pakistán y Somalia. El Primer Ministro qatarí viajó a Nueva York para asistir.
"Este ataque pone a prueba a la comunidad internacional", dijo al-Thani al consejo. "Israel, liderado por extremistas fanfarrones, ha sobrepasado todos los límites en cuanto a su comportamiento. No podemos predecir qué hará Israel. ¿Cómo podemos alojar a representantes israelíes cuando han cometido este ataque?".
El embajador de Pakistán, Asim Iftikhar Ahmad, dijo: "Es evidente que Israel, la potencia ocupante, está empeñada en hacer todo lo posible para socavar y hacer estallar toda posibilidad de paz".
Mientras tanto, el embajador de Argelia, Amar Bendjama, dijo que el Consejo de Seguridad seguía "limitado" ya que era "incapaz incluso de nombrar al agresor, de calificar la agresión como una violación del derecho internacional".
El representante de Israel, Danny Danon, defendió el ataque, diciendo en la reunión: "Este ataque envía un mensaje que debería resonar en esta cámara. No hay santuario para los terroristas, ni en Gaza, ni en Teherán, ni en Doha".
Para que se emita una declaración del Consejo de Seguridad, los 15 miembros deben aprobar el texto. EE.UU. ha bloqueado durante mucho tiempo las declaraciones críticas con Israel, por lo que su apoyo a esta, aunque Israel no sea nombrado, es notable.
El presidente estadounidense Donald Trump criticó anteriormente los ataques de Israel, escribiendo que atacar unilateralmente dentro de Qatar "no avanza los objetivos de Israel o de América". Sin embargo, añadió que "este incidente desafortunado podría servir como una oportunidad para la PAZ", y que la eliminación de Hamas era un "objetivo valioso".
Los ataques sobre Doha conmocionaron a muchos en la región, que habían asumido durante mucho tiempo que las estrechas relaciones con EE.UU. ofrecerían seguridad.
En mayo, Trump anunció un acuerdo económico "histórico" firmado entre Qatar y EE.UU. que dijo estaba valorado en al menos 1,2 billones de dólares. Qatar también regaló recientemente a Trump un avión, valorado en 400 millones de dólares, como un "regalo incondicional" para ser usado como el nuevo Air Force One, el avión oficial del presidente de EE.UU.
El viernes, los Emiratos Árabes Unidos (EAU) convocaron al embajador adjunto israelí por el ataque israelí sobre Doha, así como por lo que describió como comentarios "hostiles e inaceptables" del Primer Ministro israelí Benjamin Netanyahu.
Los EAU normalizaron sus relaciones diplomáticas con Israel bajo los Acuerdos de Abraham de 2020, un acuerdo mediado por EE.UU. que condujo a la cooperación en una variedad de temas, desde seguridad hasta economía.
Los acuerdos, que también fueron firmados por Marruecos, Bahréin y Sudán, son ampliamente vistos como uno de los mayores logros en política exterior de Donald Trump durante su primer mandato.
Hamas dijo que su equipo de negociación sobrevivió a los ataques de Israel en Doha el martes, pero que cinco de sus miembros murieron, incluyendo el hijo del principal negociador del grupo, Khalil al-Hayya. Un oficial de seguridad qatarí también murió.