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Los números de extranjeros no pertenecientes a la UE que compraron propiedades de alto valor en España se dispararon para obtener visas doradas antes de que el programa finalmente fuera eliminado, según muestran nuevos datos.
Después de que el gobierno español finalmente eliminara el controvertido programa de visas doradas el 3 de abril de 2025, han surgido datos que sugieren que hubo una avalancha de extranjeros no pertenecientes a la UE que compraron propiedades de lujo para obtener una antes de que fuera demasiado tarde.
Las compras de viviendas por parte de extranjeros en España aumentaron a casi 93,000 transacciones en 2024, un 6.4 por ciento más que en 2023, según cifras de la Asociación de Registradores.
Lo notable es el aumento del 20 por ciento en las ventas por encima de medio millón de euros, el umbral para acceder al programa de residencia de visas doradas a través de la compra de propiedades.
El diario español El País informa que la eliminación del programa de visas “es una de las razones que ha impulsado recientemente las compras de alto valor por parte de compradores extranjeros, según expertos del sector, aunque el aumento general de los precios también es un factor.”
Un total de 573 visas doradas fueron emitidas a ciudadanos no pertenecientes a la UE desde abril de 2024 – cuando el primer ministro Pedro Sánchez anunció por primera vez que eliminaría esta opción de residencia – hasta diciembre de 2024.
La mejor opción para los no ciudadanos de la UE con altos ingresos ahora es la visa no lucrativa o la visa de nómada digital.
François Carriere, presidente de la firma de corretaje inmobiliario Coldwell Banker España y Andorra, le dijo a El País: “Hemos notado un ligero aumento en el interés de los compradores internacionales por propiedades valoradas en €500,000 en los últimos meses. Aunque este aumento no ha sido muy significativo, refleja una reacción del mercado para aprovechar el programa de visas doradas.”
Él agregó, sin embargo, que esas transacciones para obtener una visa de residencia a través de la inversión en propiedades solo representaron el 5 por ciento de las compras totales de clientes internacionales.
Al gobierno español le llevó aproximadamente un año encontrar la vía legal para asegurar la cancelación de la visa dorada. Esto ha sido ampliamente interpretado como un incentivo para que muchos extranjeros realicen compras rápidas antes de que el programa fuera eliminado.
“Hemos tenido varios clientes, por ejemplo de Estados Unidos y Costa Rica, que tenían prisa porque el plazo para obtener la visa dorada se estaba agotando”, dijo Rubén González, socio fundador de Mavericks Inmobiliaria, a El País.
Los destinos más populares para los clientes extranjeros, agregó, son las islas y las costas de Andalucía, Valencia y Cataluña, lugares que atraen principalmente a ciudadanos británicos, alemanes y del norte de Europa. La capital y las grandes ciudades fueron los destinos favoritos de los compradores estadounidenses.
Observando solo las transacciones de propiedades iguales o superiores a €500,000, las estadísticas alcanzan niveles récord justo cuando se eliminaba el programa dorado: el 10.76 por ciento de todas las compras de viviendas realizadas por extranjeros eran iguales o superiores a medio millón de euros, el porcentaje más alto registrado. Más de la mitad de estas transacciones, el 52.57 por ciento, correspondieron a nacionalidades no pertenecientes a la UE, aquellas que necesitarían una visa para vivir en España.
España otorgó un total de 33,237 visas doradas (incluidas para miembros de la familia) y el 95 por ciento de estas autorizaciones de residencia se otorgaron para la compra de una vivienda o viviendas de €500K, en lugar de las otras opciones de inversión.
Los compradores de visas doradas estaban muy concentrados geográficamente, con más del 90 por ciento de ellos en Barcelona, Madrid, Málaga, Alicante, las Islas Baleares, Girona y Valencia.
Los mayores beneficiarios del programa fueron compradores asiáticos, principalmente chinos, así como ciudadanos europeos no pertenecientes a la UE como rusos, ucranianos y británicos.
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