Por mucho que lo intenten, varias “autoridades” terminan contradiciéndose al dar un número sobre cuántos alquileres turísticos ilegales hay en Mallorca/las Baleares. Esto suponiendo que, de hecho, proporcionen una cifra, algo que no siempre ocurre. En este sentido, empecemos con el conseller de Turisme balear, Jaume Bauzá. Preguntado recientemente si tenía idea de cuántos alquileres irregulares existen, respondió: “No tenemos cifras ni estimaciones aproximadas, pero sabemos que en núcleos grandes como Palma o Ibiza, seguro que hay muchos. La sensación es que el volumen de ilegales allí es considerable”.
Ahí lo tenemos. Hay muchos alquileres ilegales. Pero quizá no por mucho tiempo, porque se han destinado “millones de euros” (incluidos fondos del impuesto turístico) a los consells insulares para aumentar inspectores. Millones para abordar un problema grande. ¿Cuántos millones se necesitan exactamente para “muchos”? ¿Alguien se atreve a adivinarlo?
La postura del conseller resultó un tanto peculiar. ¿Habrá olvidado lo que la Agencia Tributaria y los consells afirmaron haber detectado hace catorce meses? Unos 8.700 alquileres ilegales en todo el archipiélago. Y fueron sus propios compañeros de gobierno (quizá él mismo) quienes, en septiembre anterior, encomendaron a los consells y a la agencia la tarea de dar con un número.
Dicho esto, quizá el conseller no estaba del todo convencido. Los consells y la agencia habían cruzado datos de propiedades registradas (o no) con el pago (o no) del impuesto turístico. No soy dueño de un alquiler ilegal, ni legal, así que no puedo juzgar su razonamiento, pero si tuviera uno, lo último que haría sería declarar ingresos por el impuesto turístico. O por cualquier otro concepto.
Pero, ¿eran 8.700 una cantidad significativa? Quizá, y sin duda mayor que la cifra que el ministro de Consumo, Pablo Bustinduy, dio en febrero: unos 7.000 alquileres irregulares en Baleares, según informó al Govern. Incluso adjuntó un archivo con los datos. ¿Habrá Bauzá archivado debidamente ese informe? Bustinduy es de Sumar, antes parte del ala más “blandita” de Podemos, la de Iñigo Errejón.
El conseller de Turisme del Consell de Mallorca, José Marcial Rodríguez, al menos ha dado cierto crédito a los 7.000 de Bustinduy. Hace un mes señaló que “muchos coinciden con los que ya estamos investigando”. ¿Y cuáles son? Todos los ilegales en Mallorca. Sugirió que, hacia finales de temporada, tendría una cifra. Solo será para Mallorca, pero será algo, y podría resultar ser “mucho”, según cómo se defina (y cómo lo defina el conseller).
Aunque Rodríguez parece aceptar los 7.000 de Bustinduy como aproximación (Bauzá ni los mencionó), la semana pasada el alcalde de Palma, Jaime Martínez, dejó esa cifra en ridículo: 15.000 solo en Palma, afirmó. Luego aclaró (?) que se refería a anuncios de alquileres ilegales. Como hay plataformas distintas, no conocía el número real. “Es muy difícil cuantificar los anuncios ilegales”, admitió el exconseller, añadiendo que hay unos 50.000 en Mallorca, muchos probablemente repetidos.
Realmente es difícil cuantificarlos, por eso nadie da una cifra exacta, salvo Rodríguez más adelante. Aunque él mismo advirtió: muchos se anuncian fuera de Airbnb, algo que se descubrió hace un par de años.
Entonces, ¿cómo los rastreará el Consell? ¿Podrá hacerlo? Mientras, Airbnb ha asumido cierta responsabilidad y acordó un sistema que, según el Consell, eliminará los anuncios ilegales. En teoría. Airbnb no es la única, pero si realmente los elimina todos, el número no será tan alto como pensamos, incluido el conseller. Claro, luego quedarán las redes sociales, donde se publican cuando los inspectores duermen o están en la playa el finde.
Supongo que, en algún rincón del Consell o la conselleria, habrá expertos con IA y Big Data rastreando el ciberespacio para responder la gran pregunta: ¿cuántos ilegales hay realmente? Y, al saberlo, ¿qué? Pues multas. Sobre esto, el Consell negó rotundamente que se falsificaran datos de sanciones: 2,3 millones recaudados y 5,5 en proceso. Vamos, un buen pico.
