El presidente de Kenia, William Ruto, dice que está construyendo una iglesia en la residencia presidencial en Nairobi y que él mismo la pagará. Además, afirma que no tiene nada de qué disculparse.
"No voy a pedir perdón por construir una iglesia. El diablo puede enojarse y hacer lo que quiera," dijo Ruto el viernes.
Esta declaración ha enfurecido a los kenianos, quienes ya están frustrados con su estilo de liderazgo y lo que consideran una mezcla inadecuada entre el Estado y la iglesia.
La BBC ha solicitado un comentario al gobierno.
No está claro a quién se refería Ruto como "el diablo" en sus declaraciones, pero asegura que nada detendrá el proyecto.
"No empecé a construir esta iglesia cuando llegué a la Casa de Estado. Había una, pero de láminas de hierro. ¿Eso es apropiado para la residencia presidencial?" dijo Ruto con firmeza a políticos en una reunión.
El viernes, el periódico Daily Nation publicó diseños de un edificio grande con vidrieras y capacidad para 8.000 personas.
El diario cuestionó si el proyecto va en contra de la constitución secular de Kenia. También hay críticas por el costo, estimado en $9 millones, en un momento de crisis económica.
Ruto afirma que pagará de su propio bolsillo, pero surge la duda si tiene derecho a construir algo así en propiedad estatal.
La Sociedad de Ateos de Kenia amenaza con acciones legales, tildando el proyecto de inaceptable.
"Vemos esto como antidemocrático y un impulso al nacionalismo cristiano. Kenia no es solo para cristianos," dijo su líder, Harrison Mumia.
Ruto es el primer presidente evangélico de Kenia, conocido por citar la Biblia y llorar en público, ganándose el apodo de "vicario de Jesús".
Cuando era vicepresidente, construyó una iglesia en su residencia oficial.
Aunque el 85% de kenianos son cristianos, también hay un 11% de musulmanes y otras minorías religiosas. No hay mezquita o templo en la presidencia.
El arzobispo católico de Nairobi pide claridad sobre el proyecto, para evitar favoritismos hacia una denominación cristiana.
"Debemos ser cuidadosos. Esto debería construirse en un lugar que no sea una institución pública, a menos que sea una capellanía, pero tampoco está claro," dijo.