La sabiduría popular sostiene que muchos nazis huyeron a Sudamérica, pero cientos más también se establecieron en España tras la Segunda Guerra Mundial con la ayuda del dictador franquista. En particular, el municipio valenciano de Dénia oculta un pasado muy oscuro.
Dénia, una pequeña y exclusiva localidad portuaria de la Costa Blanca en la costa mediterránea oriental de España, es famosa por sus playas doradas y su animada vida callejera.
Si la has visitado, quizás hayas paseado por su pintoresco casco antiguo hasta el castillo, que domina la marina, o hayas visto las ruinas romanas en su museo.
Lo que quizás no hayas sabido es que, tras la contienda, Dénia se convirtió no solo en un lugar de tránsito para nazis que huían de Europa (conocido como ‘ruta de escape’ o ‘ratline’) sino en un santuario para muchos a los que se permitió establecerse y disfrutar allí de su jubilación.
En realidad, las aguas cristalinas de Dénia esconden un pasado mucho más turbio que revela la facilidad con la que los nazis se asentaron en las costas españolas, y la incómoda relación entre la España de Franco y el Tercer Reich.
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Existen pruebas de la presencia de nazis prominentes en Dénia (Alicante) desde la década de 1930 hasta mediados de los 90. Foto: Capturando el Tiempo en Segundos/Unsplash
¿La Costa Blanca, residencia de jubilación nazi?
La Costa Blanca es uno de los destinos turísticos más cotizados y visitados del mundo. Tanto, al parecer, que incluso los exnazis coincidieron en ello.
Dénia fue, por ejemplo, el destino elegido por Gerhard Bremer, un alto rango Sturmbannführer de las Waffen SS condecorado, entre una multitud de medallas y condecoraciones, con la Cruz de Caballero de la Cruz de Hierro, una distinción otorgada solo por un compromiso extremo con la Alemania nazi.
Tras ser condenado en los juicios de Núremberg, Bremer vivió feliz en Dénia hasta su muerte en 1989, convirtiéndose en un empresario local y construyendo bungalows y hoteles durante el nacimiento del turismo en la Costa Blanca.
Bremer y su familia, según se informa, se integraron en la comunidad, y sus hijos asistieron a escuelas locales.
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De hecho, algunos nazis se sentían tan cómodos en España que muchos, aunque manteniendo discreción por supuesto, nunca sintieron la necesidad de renunciar a su ideología.
Según el historiador español José Muñoz, cada 20 de abril, un grupo de alemanes se reunía en el restaurante Finita de Dénia para celebrar el cumpleaños de Hitler.
“Lo hacían de forma discreta, un grup reducido de personas entre semana, no con una fiesta abierta a todo el pueblo”, declaró al sitio web español Newtrawl, “no eran tontos”.
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Otro de los primeros en llegar a la Costa Blanca fue Johannes Bernhardt, general honorario de las SS y empresario que había suministrado armas a Franco, quien luego le recompensó con la nacionalidad española para evitar su extradición.
Según el historiador Stanley G. Payne, “Bernhardt vivió discretamente entre Madrid y Dénia, sin integrarse con la población local. En 1953, partió hacia Argentina.
Un tercer nazi prominente en Dénia fue Anton Galler, señalado por el gobierno italiano como el comandante del ejército nazi responsable de la masacre de Sant’Anna. Vivió en Dénia el resto de su vida y allí fue enterrado en 1995.
También se cree que el notorio Otto Skorzeny, el hombre que organizó la misión para rescatar a Benito Mussolini en septiembre de 1943 y apodado ‘el hombre más peligroso de España’, también vivió en la Costa Blanca.
Hitler saluda al dictador fascista español Francisco Franco en la estación de tren de Hendaya, en la frontera franco-española, el 23 de octubre de 1940. (Foto de AFP)
Nazis en otras partes de España
Estos ejemplos notables de altos mandos nazis conocidos en Dénia son solo un puñado de los cientos de presuntos nazis que se establecieron en España tras la guerra.
Y no era un secreto; en 1947, Estados Unidos escribió a Franco con una lista de 104 personas sospechosas de ser nazis, o al menos vinculadas al partido, que se encontraban en territorio español.
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Su lista inicial contenía hasta 1.600 nombres, aunque finalmente los estadounidenses se centraron en los 104 más notorios para su extradición.
Pero quizás que antiguos jerarcas nazis se establecieran en España no sorprendió demasiado a los servicios de inteligencia británicos.
Durante la guerra, muchos en el establishment británico temían las simpatías españolas hacia la Alemania nazi, tanto que el MI6 sobornó a altos oficiales españoles con el equivalente a 179 millones de euros para mantener la neutralidad del país.
El infame nazi belga Léon Degrelle se estableció en Málaga, en la Costa del Sol, y en este caso, no hizo grandes esfuerzos por ocultar su identidad. Tras reubicarse en Málaga con ayuda del gobierno español y mantener un perfil bajo durante unos años, Degrelle se convirtió en una figura cada vez más pública en la década de 1960.
Se relacionaba con otros nazis escondidos en España, incluido el coronel austríaco de las SS Otto Skorzeny, e incluso lució su uniforme de las SS en la boda de su hija en 1969.
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Tras las tensiones diplomáticas entre España y Bélgica durante las décadas de 1960 y 1970, Degrelle obtuvo la ciudadanía española y vivió muy cómodamente en Málaga, habiendo prosperado económicamente gracias a su empresa de construcción, que levantó bases aéreas estadounidenses en España, increíblemente, bajo su nombre real.
Degrelle se sentía tan cómodo en España, de hecho, que asistió a una celebración del centenario del nacimiento de Hitler en Madrid en 1989.
En cuanto a Skorzeny, a quien no le agradaba que también le llamaran ‘Cara Cortada’, declaró en una entrevista con el Daily Express en 1952: “Por fin me siento libre en España, puedo quitarme la máscara y no tengo razones para vivir en secreto”.
Hay cientos de nazis y simpatizantes nazis más que encontraron un refugio seguro en la España franquista, desde el País Vasco hasta Barcelona y Mallorca, viviendo el resto de sus días en paz bajo el sol español, a pesar de los crímenes que cometieron.
Si deseas profundizar en la historia de los nazis en España, existen varios libros que ofrecen muchos más detalles sobre el tema, así como la película hispano-belga de 2021 El suplente (tráiler a continuación) o la serie española Jaguar.