Un jurado de Los Ángeles declaró a Cardi B no culpable de agredir a una guardia de seguridad rasguñándola con las uñas. El juicio civil, bastante llamativo, terminó después de que el jurado deliberara por menos de una hora.
Emani Ellis había alegado que la rapera ganadora de un Grammy le cortó la mejilla con una uña postiza de tres pulgadas (7.5 cm) y le escupió afuera de una consulta médica en 2018.
El jurado necesitó poco menos de una hora para absolver a la rapera, cuyo nombre real es Belcalis Marlenis Almánzar, de los cargos de agresión, batería, infligir angustia emocional intencional, negligencia y falso encarcelamiento.
Afuera del tribunal de Alhambra, Cardi B agradeció a sus abogados, a los medios y a sus fans, y negó una vez más que hubiera tocado a Ellis.
“Superemos esto,” dijo. “Pero les doy un aviso: no soy de esas celebridades que vas a demandar y piensas que van a llegar a un acuerdo. Especialmente cuando soy super, completamente inocente.
“Sé que tengo cierta reputación, pero lo juro por dios que soy inocente,” añadió, entre las risas de los medios.
El juicio civil se centró en una cita médica a la que asistió Cardi B cuando tenía cuatro meses de embarazo de su primer hijo en 2018. La consulta había cerrado ese día a otros pacientes para proteger su privacidad, ya que su embarazo aún no era público.
La rapera afirmó que Ellis, quien era guardia de seguridad del edificio, la siguió hasta la consulta en el quinto piso, dijo su nombre por teléfono y parecía estar grabándola, lo que hizo que temiera que su embarazo se revelara, llevando a lo que la rapera describió como solo una “pelea verbal”.
Ellis, que perdió su trabajo después del encuentro, alegó que Cardi B también le había arañado la cara con una uña postiza, lo que resultó en una cicatriz que requirió cirugía estética. Testificó que se sintió humillada y traumatizada.
Ellis buscaba una compensación por gastos médicos, daños emocionales y físicos, salarios perdidos, además de daños punitivos.
Cardi B declaró en el estrado que la estaban demandando por 24 millones de dólares, pero el abogado de Ellis dijo en sus argumentos finales que correspondía al jurado decidir el monto.
Muchas de las respuestas de Cardi B durante su testimonio se volvieron virales, incluso cuando describió a Ellis como “demasiado segura”. Cuando el abogado de Ellis le preguntó si la había llamado “gorda”, Cardi B respondió: “No. La estaba llamando perra”.
Una parte significativa del juicio se dedicó a las uñas acrílicas de la rapera decoradas con piedras. Cuando el abogado de Ellis le preguntó si era físicamente capaz de arañar a alguien en ese momento, la artista respondió: “Pero no lo hice porque tenía un bebé dentro de mí”.
El abogado entonces preguntó: “¿Estás discapacitada? ¿Sí o no?”
“En ese momento, cuando estás embarazada, estoy muy discapacitada. ¿Quieres que te diga las cosas que no puedo hacer?” dijo Cardi B, provocando risas en la sala.
La rapera negó que ella o Ellis se hubieran tocado, pero reconoció que su discusión se acaloró, relatando muchos de los insultos que se dijeron. Dijo que aunque estuvieron pecho a pecho en un momento, la pelea nunca se volvió física.
“Ella no pudo recibir un arañazo de mi parte porque yo no la toqué,” dijo Cardi B.
Cuando el abogado de Ellis le preguntó si había estado enojada, Cardi B respondió: “¡Sí, estaba enojada! ¡Porque estoy embarazada! ¡Y esta chica está a punto de patearme el culo!”
Tanto David Finke, el médico que Cardi B iba a ver ese día, como Tierra Malcolm, la recepcionista que separó la discusión, dieron testimonio que en su mayoría apoyó la versión de Cardi B, diciendo que no vieron ninguna pelea física.
Cuando le pidieron que caracterizara la discusión, Malcolm dijo que no estaba segura de si podía decir malas palabras en la corte.
“Ya hemos escuchado de todo hasta ahora, así que está bien,” dijo el Juez Ian C. Fusselman, entre las risas de la sala.