BioNTech adquiere CureVac en una operación de 1.250 millones de dólares para impulsar tratamientos contra el cáncer
BioNTech, la empresa biotecnológica reconocida por desarrollar una vacuna de ARN mensajero contra el COVID-19, ha acordado la compra de CureVac, otra compañía especializada en tecnología mRNA, en un acuerdo accionario valorado en 1.250 millones de dólares. Esta fusión une a dos compañías que aplican sus respectivas tecnologías en el desarrollo de nuevos tratamientos oncológicos.
El acuerdo anunciado este jueves integra el portafolio de proyectos y la infraestructura de producción de CureVac bajo BioNTech, una empresa mucho mas grande cuyo crecimiento ha sido impulsado por los ingresos de su vacuna comercializada, Comirnaty. Ambas firmas presentaron la adquisición como una forma de combinar tecnologías y capacidades complementarias. Sin embargo, BioNTech y CureVac no siempre mantuvieron relaciones cordiales; de hecho, llevan tres años enfrentadas en los tribunales.
BioNTech, con sede en Maguncia (Alemania), y CureVac, radicada en Tubinga, alcanzaron prominencia durante la pandemia gracias a sus plataformas de ARN mensajero. Mientras que la vacuna de CureVac contra el COVID-19 no cumplió con las expectativas en ensayos clínicos, la de BioNTech, desarrollada con Pfizer, se convirtió en la primera autorizada y luego aprobada por la FDA.
Fundada ocho años antes que BioNTech, CureVac alegó que sus patentes fueron clave para el diseño de Comirnaty. En 2022, demandó a BioNTech en Europa por infracción de patentes. Recientemente, la Oficina Europea de Patentes respaldó la validez de dos patentes de CureVac, lo que aumentó la presión legal sobre BioNTech.
Según Daina Graybosch, analista de Leerink Partners, esta adquisición es una medida para mitigar riesgos legales y financieros. Si perdía en los tribunales, BioNTech podría haber tenido que pagar regalías retroactivas por sus ventas globales de Comirnaty (32.000 millones hasta ahora). Adquirir CureVac equivale a un acuerdo extrajudicial, con el bonus de acceder a su plataforma de vacunas oncológicas en desarrollo.
CureVac desarrolló su vacuna COVID-19 con GSK, pero tras su fracaso, GSK asumió el desarrollo de una vacuna contra la gripe aviar. CureVac se reestructuró para centrarse en vacunas contra el cáncer, aún en fases preclínicas.
Para BioNTech, el cáncer siempre fue su prioridad. Actualmente, su estrategia oncológica gira en torno al anticuerpo BNT327, dirigido a las proteínas PD-L1 y VEGF-A. Recientemente, Bristol Myers Squibb acordó pagar 1.500 millones para colaborar en este fármaco.
El acuerdo establece que cada acción de CureVac se intercambiará por 5,45 dólares en acciones de BioNTech, un 32,6% más que su valor al cierre del miércoles. Los accionistas de CureVac poseerán entre el 4% y 6% de BioNTech tras la transacción, que se espera concluya este año.
El gobierno alemán ha expresado su apoyo al acuerdo. Mientras tanto, accionistas que representan el 36,76% de CureVac ya respaldaron la operación.
"Esta fusión refuerza nuestra estrategia oncológica y es una inversión en el futuro de la medicina contra el cáncer", declaró Ugur Sahin, CEO de BioNTech.
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