Los refugiados sirios que regresan a su país desde Alemania corren el riesgo de perder su estatus de protección, dijo un portavoz del Ministerio del Interior el viernes en Berlín.
“El Ministerio Federal del Interior ha decidido no facilitar los viajes a su país de origen para los sirios sin que esto afecte a su estatus protegido, después de una consideración exhaustiva”, declaró el portavoz en respuesta a una pregunta.
El gobierno anterior consideró permitir viajes a Siria para que los refugiados se prepararan para un posible regreso permanente. Turquía ha hecho un acuerdo similar para sus refugiados sirios.
La entonces ministra del Interior, Nancy Faeser, apoyó la idea, que había sido propuesta por la Oficina de Asuntos Exteriores, pero no la había implementado cuando el nuevo gobierno de centroderecha asumió el poder en mayo.
Las normas actuales permiten a los sirios mantener el estatus de protección después de un viaje a su casa solo en casos excepcionales, como por la enfermedad grave de un familiar en Siria.
La autoridad alemana de migración y refugiados suspendió todas las decisiones sobre las solicitudes de asilo sirias después de la caída del dictador Bashar al-Assad en diciembre, con excepciones para criminales y personas consideradas potencialmente peligrosas, además de aquellos casos donde otro país de la UE es responsable.
El ministro de Asuntos Exteriores, Johann Wadephul, no cree que los sirios regresen en gran número en el futuro cercano, debido a la grave destrucción de su país.
Durante una visita a un suburbio de Damasco esta semana, Wadephul observó que mucha de la infrastructura del país había sido destruida.