Una reputada brasería de Bruselas cierra sus puertas para siempre.
Crédito de la foto: La Brasserie Saint-Julien via Facebook
Una QUERIDA brasería en el municipio bruselense de Auderghem, Bélgica, cierra oficialmente sus puertas tras una lucha encarnizada en medio de un sector hostelero en declive en el país. La Brasserie Saint-Julien, que operaba bajo esta denominación desde 2019, se vió obligada a clausurar su actividad definitivamente el jueves 18 de septiembre, dejando atrás a una consternada clientela habitual.
«Queridos amigos y estimados clientes», declaró la brasería en una sombría publicación en Facebook, «La Brasserie Saint-Julien, un auténtico lugar de encuentro y convivencia, lamentablemente cierra sus puertas. Es el fin de una bella aventura compartida con sus leales clientes y amigos, quienes conservarán la memoria de un lugar cálido y lleno de vida. ¡Fue un verdadero placer recibirles!» La brasería concluyó la publicación con un tono esperanzador, afirmando: «¡Hasta pronto para nuevas aventuras!»
La Brasserie Saint-Julien era sumamente apreciada y popular entre la población autóctona por su ambiente acogedor e íntimo y por su menú repleto de clásicos belgas, como las croquetas de gambas, las *boulettes* a la liégeoise, la *carbonnade* y el *vol-au-vent*. Pese a la atención local y a la elevada demanda, la concurrida brasería no ha podido mantenerse operativa en el actual contexto económico belga.
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El sombrío panorama del sector hostelero en Bélgica
La brasería es una de los cientos de establecimientos belgas que se han visto forzados a echar el cierre debido al desplome del sector de la hostelería. En 2024, 813 restaurantes en Bélgica tuvieron que cerrar, lo que representa aproximadamente el 3% del total de establecimientos del país. Se prevé que a finales de este año cierren definitivamente hasta 10 más en Valonia.
Todo esto viene tras un difícil 2024 para el sector hostelero de Bruselas, con un aumento en el número de bancarrotas de hoteles belgas y un descenso en el gasto turístico.
Esta tendencia parece estar causada por una combinación de factores: la inflación, los elevados impuestos y costes de la seguridad social, el aumento del teletrabajo y la competencia de las cadenas de comida rápida, más asequibles.