Un hombre acusado del asesinato de John George y de abandonar su cuerpo bajo un limonero en Rojales ha obtenido la libertad bajo fianza, previo pago de una caución de 100.000 euros.
Jonathan ‘Jonny’ Alan Smyth, de 27 años y natural del Condado de Antrim, huyó de España tras la desaparición del señor George el pasado mes de diciembre.
La familia de John George lo denunció como desaparecido a mediados de ese mes, después de que este viajara de vacaciones a la Costa Orihuela, donde se alojó con Smyth.
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JOHN GEORGE
Su cuerpo fue hallado el 7 de enero. El padre de dos hijos, de 37 años y originario de Belfast, fue encontrado completamente desnudo y presentaba heridas de arma blanca en las piernas —presuntamente para inmovilizarlo— antes de ser disparado en dos ocasiones.
Smyth fue localizado en un apartamento de Airbnb en Braga, Portugal, donde fue detenido el 25 de marzo.
En dicho alojamiento se hospedaba junto a su esposa de 20 años, Madison.
Fue extraditado a España al mes siguiente y ingresado en prisión por un juzgado de Torrevieja a la espera de juicio.
Ahora, un juez ha accedido a la solicitud de libertad provisional presentada por sus dos abogados, una medida que fue objetada por la fiscalía.
Según informó el diario Información, la resolución se dictó el lunes.
El magistrado indicó que, si bien existen indicios suficientes para mantener la acusación de homicidio contra Smyth, la prisión preventiva ya no resulta imprescindible para garantizar su disposición ante el tribunal.
Añadió que podrían imponerse medidas adecuadas para evitar un riesgo de fuga.
Smyth deberá personarse diariamente ante la autoridad judicial y fijar una residencia en España.
Se le retirará el pasaporte y se le prohibirá salir del país sin autorización previa.
Las condiciones de la fianza incluyen también una orden de alejamiento de un kilómetro respecto a cualquier persona vinculada al caso.
Información reportó que, hasta el miércoles, la fianza de 100.000 euros no había sido abonada, y se sugiere que Smyth enfrenta dificultades para reunir el dinero.
Un ciudadano checo de 33 años fue detenido y puesto en libertad con cargos en enero, como presunto cómplice del crimen.
En su escrito de solicitud de fianza, los letrados de Smyth argumentaron que el otro sospechoso, Michal M., fue liberado tras su detención.
Han cuestionado sus declaraciones, en las que afirmaba no saber prácticamente nada sobre John George, a pesar de ser —según consta— la última persona que lo vió con vida.
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