La economía constituye un tema primordial
Sin embargo, la realidad económica es percibida como el asunto fundamental en todos los estratos de la sociedad boliviana.
El sondeo de Ipsos Ciesmori reveló que los votantes identificaron la crisis económica de Bolivia como su principal inquietud de cara a la segunda vuelta. Otras preocupaciones clave incluyeron el aumento de los precios al consumidor y la palpable escasez de combustible.
En los últimos años, Bolivia ha experimentado una marcada caída en su producción de gas natural, la principal fuente de ingresos por exportaciones del país.
Con las reservas de su principal producto de exportación prácticamente agotadas, la nación tiene una capacidad limitada para generar divisas. Esto ha contribuido a una persistente escasez de dólares estadounidenses, lo que a su vez ha obstaculizado la importación de bienes.
Como consecuencia, los precios se han disparado y ha emergido un mercado paralelo no oficial para cambiar el boliviano por dólares, aunque a un tipo de cambio más elevado que el oficial habitual.
Una mujer coloca una corona de flores alrededor del cuello de Rodrigo Paz durante un mitin de cierre de campaña en Tarija, Bolivia, el 15 de octubre (Juan Karita/AP Photo)
Según Jáuregui, el viraje hacia la derecha en el país es una respuesta a las dificultades económicas que muchos atribuyen al actual gobierno del presidente saliente Luis Arce.
Pero también se debe al progresivo debilitamiento de un proyecto político de izquierda que ha perdido su rumbo.
“Desde el inicio, el proyecto histórico del MAS cumplió sus objetivos y ha agotado su ciclo; ya no ofrece nuevas propuestas para una sociedad en transformación”, afirmó Jáuregui.
“La crisis económica ha exacerbado todo esto, impulsando la búsqueda de algo diferente”.
Para abordar el deterioro financiero, los dos candidatos de derecha en la segunda vuelta de este domingo han adoptado enfoques distintos.
Quiroga ha abogado por una mayor inversión extranjera y la implementación de medidas de austeridad que “acaben con el gasto superfluo”, aunque los críticos advierten que eso podría suceder a costa de los programas sociales.
“Estoy aquí para cambiarlo todo, dramática y radicalmente”, declaró Quiroga a The Associated Press en agosto.
Jorge ‘Tuto’ Quiroga saluda durante un mitin de clausura de campaña en La Paz, Bolivia, el 15 de octubre (Natacha Pisarenko/AP Photo)
Paz, por su parte, ha propuesto reformas más graduales bajo el lema “Capitalismo para todos”. Entre sus propuestas se encuentran reducciones de impuestos, bajadas arancelarias y la descentralización del gobierno nacional.
“El 85 por ciento del presupuesto lo gestiona hoy el Gobierno central”, afirmó Paz al diario digital Infobae. “Eso debe cambiar en beneficio de las regiones”.
Al igual que Quiroga, Paz se ha comprometido a combatir la corrupción gubernamental, arguyendo que “cuando el dinero no se desvía, hay suficiente para todos”. Pero a diferencia de Quiroga, Paz considera que sería imprudente solicitar préstamos internacionales antes de que la economía boliviana se haya estabilizado.
Ambos candidatos también han expresado su intención de restablecer las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, rotas en 2008 en medio de tensiones por la “guerra contra las drogas” de Washington.
No obstante, Paz y Quiroga difieren en un asunto económico crucial y polémico: el mantenimiento de los subsidios a los combustibles.
Desde finales de los años 1990, el gobierno boliviano ha vendido combustible a un precio fijo, algo que los críticos califican de insostenible. Los subsidios le cuestan al Estado miles de millones de dólares anuales.
Quiroga propone eliminar el subsidio para todos los sectores excepto el transporte público, mientras que el equipo de campaña de Paz ha vacilado entre mantener el subsidio o restringirlo a “sectores vulnerables” de la población.
