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Los conductores de autobús de la TIB mantienen que el accidente fatal en Pollensa el jueves puede estar relacionado con los horarios y el estrés. El accidente se ha atribuido a una falla mecánica, pero un conductor dice que detrás de esto “hay horarios muy ajustados, poco realistas”.
“Estos horarios tan ajustados nos causan estrés crónico”. Los conductores están “bajo presión”. “Nos vemos obligados a pisar más el acelerador, a ir a velocidades más altas. Tenemos menos margen para reaccionar. Personas que nunca han conducido un autobús establecen horarios poco realistas, poniendo en peligro a otros y culpando al eslabón más débil de la cadena, el conductor, que también es la víctima.” Y el Consorcio de Transportes de Mallorca “es uno de los principales culpables”.
“Desde sus cómodas oficinas con aire acondicionado, establecen horarios absurdos e imposibles de cumplir, como si los autobuses circularan por carreteras vacías en lugar de atestadas. ¿Quién diseña estos horarios? ¿Alguien que haya conducido un autobús alguna vez? Lo dudamos, porque si fuera así, sabrían que están poniendo en peligro a conductores, peatones y pasajeros todos los días.”
Un ciclista de 48 años murió cuando un autobús atropelló a un grupo de ciclistas en la carretera de Pollensa a Puerto Pollensa el jueves. El accidente ocurrió cerca del cruce de Cala San Vicente, en sí mismo un punto negro notorio. Otros dos ciclistas fueron ingresados en la UCI del Hospital Son Espases tras sufrir lesiones graves.
El viernes, el portavoz del Gobierno Balear, Antoni Costa, dijo que el autobús había sido inspeccionado por última vez el 31 de marzo y que no se habían encontrado fallas. El accidente de Pollensa ocurrió tres días después de que un conductor de un automóvil muriera en una colisión frontal con un autobús de la TIB en la carretera Portocolom-Felanitx.
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