Los monitores continuos de glucosa ya no son exclusivos para personas con diabetes. En marzo del año pasado, DexCom obtuvo la aprobación de la FDA para su CGM de venta libre, y luego, un par de meses después, su principal competidor, Abbott, consiguió la autorización para dos dispositivos CGM de venta libre propios.
La FDA aprobó estos CGMs de venta libre para su uso en personas con y sin diabetes, pero aún persisten dudas sobre cómo los clínicos y los individuos pueden interpretar los datos que estos dispositivos recogen. Para investigar qué significan realmente los datos del CGM fuera del ámbito de la diabetes, investigadores del Mass General Brigham en Boston realizaron un estudio. Los resultados, publicados esta semana, revelaron que las lecturas del CGM se alinean bien con las medidas estándar en personas con diabetes, pero son menos fiables en aquellas sin la condición.
El estudio analizó datos de 972 personas mayores de 40 años. Dentro de este grupo, 421 tenían diabetes tipo 2, 319 tenían prediabetes y 232 presentaban niveles normales de azúcar en sangre.
Los investigadores descubrieron que, si bien métricas del CGM como la glucosa promedio y el tiempo en rango coincidían estrechamente con las medidas estándar para personas con diabetes, estas mismas métricas eran menos consistentes para aquellos con prediabetes o niveles normales de glucosa.
Estos hallazgos sugieren que los CGMs podrían ser más útiles para rastrear los efectos de estilo de vida a corto plazo que para proporcionar una imagen clínica definitiva, señaló el Dr. Jorge Rodríguez, médico de medicina interna en Mass General Brigham y uno de los autores del estudio.
Señaló que los CGMs pueden ayudar a las personas a ver cómo factores del estilo de vida, como la dieta, la actividad y el sueño, afectan la glucosa en tiempo real.
El Dr. Rodríguez comentó que él ha sido testigo de esto de primera mano, ya que ha utilizado un CGM de venta libre y nunca ha sido diagnosticado con diabetes o prediabetes.
“Hubo un día en que comí una sopa. Pensé que estaba siendo saludable al elegir una sopa. Resulta que la sopa tenía fideos de arroz. No sabía que estos fideos iban a elevar tanto mi azúcar, y así se mantubo durante bastante tiempo. Por alguna razón, no caí en que esto no era lo mejor para comer desde un punto de vista glucémico. Fue un aprendizaje para mí”, explicó.
Señaló que se necesita más investigación sobre los CGMs orientados al consumidor.
El estudio de Mass General Brigham fue transversal, lo que significa que el equipo de investigación recopiló datos de los participantes en un único momento en el tiempo, en lugar de hacer un seguimiento durante meses o años. El Dr. Rodríguez afirmó que los clínicos necesitan más investigación longitudinal antes de poder entender si los patrones del CGM en pacientes no diabéticos pueden predecir resultados a largo plazo, como diabetes, enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
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