Real Mallorca 1 – Getafe 0
Un golazo de Vedat Muriqi en el minuto 12 ante el Getafe le permitió al Real Mallorca registrar únicamente su segunda victoria en casa de la temporada, ante 17.507 espectadores el domingo por la noche. Esta trabajada victoria sacó al conjunto palmesano de la zona de descenso y supuso un resultado inmejorable de cara al parón internacional que se avecina.
La primera mitad giró en torno al fantástico gol de Muriqi. Un magnífico pase al hueco de un resurgente Samu Costa encontró a Mojica, quien colocó un centimiento superbio al corazón del área para que el gran delantero kosovar, completamente solo, estampase el balón en la red con el interior de su pie derecho, logrando así su sexto tanto de la campaña.
Posteriormente, el novato portero finlandés de 2,08 metros, Lucas Bergström, mantuvo al equipo en el partido con una gran parada en los instantes previos al descanso. Tuvo un encuentro mucho más sólido que en su bautismo de fuego ante el Betis (3-0). No obstante, su distribución, especialmente con los pies, dejó mucho que desear, y un error suyo en la fase final del juego tuvo que ser solucionado por Valjent en la propia línea de meta, lo que le concedió al Mallorca una preciada portería a cero.
Como era de esperar, en la segunda mitad hicieron acto de presencia las “artes oscuras” del Getafe y la paciencia de los jugadores mallorquinistas se vio severamente puesta a prueba. Se sucedieron las entradas exageradas y la búsqueda constante del faltra, especialmente de Liso, cuyas tretas no lograron engañar al árbitro De Burgos Bengoechea, quien se negó a intimidarse por los jugadores visitantes.
El segundo tiempo no difirió excesivamente del primero: el Getafe disfrutó de mayor posesión pero fue incapaz de materializar cualquiera de sus 16 saques de esquina (el Mallorca tuvo uno). Sergio Darder volvió a fallar una oportunidad clamorosa, la primera fue ante el Levante hace dos semanas, al disparar su esfuerzo directamente contra el porte del guardameta getafense, David Soria. A pesar de la aproximación del Getafe, el Mallorca logró aguantar el tipo y, lo que es más importante, devolver la sonrisa a la afición feista al abandonar el estadio de Son Moix.