Las sobrevivientes de violencia doméstica enfrentan obstáculos importantes, desde denunciar el abuso hasta obtener órdenes de protección.
FAYETTEVILLE, Ark. — La policía dice que los casos de violencia doméstica pueden ser de las llamadas más complicadas que manejan, involucrando preocupaciones de seguridad, recolección de pruebas y un proceso legal que va más allá de las fuerzas del orden. Para las víctimas, puede ser un proceso frustrante.
Hattie Anastasio contó que lleva años intentando conseguir ayuda después de salir de lo que describe como una relación abusiva en 2018.
“Él me ha acosado a través de múltiples estados,” dijo Anastasio, añadiendo que tiene “informes hospitalarios con registros del abuso, concusiones, cosas por el estilo.”
Anastasio dijo que ha intentado navegar múltiples pasos en el sistema — reportando sus preocupaciones a la policía y buscando una orden de protección en los tribunales. Dice que le dijeron que “como él no ha sido violento recientemente, no pueden emitir una nueva orden de restricción.”
El Sargento de la Policía de Fayetteville, Stephen Mauk, dijo que el primer paso para las víctimas es contactar a la policía y hacer un reporte, indicando que “al principio, necesitas contactar al departamento de policía… necesitas reportarlo a la policía.”
Mauk añadió que la participación puede importar a medida que los casos avanzan, y enfatizó que “recomendamos que nos notifiques primero que todo. Lamentablemente, muchos casos e incidentes de violencia doméstica no se denuncian.”
Mauk también dijo que la policía juega un rol específico en el proceso: “Nosotros trabajamos en la parte inicial en cuanto a encontrar evidencia de que se ha cometido un crimen. Recolectamos esa evidencia… [y] si es posible, arrestamos por el crimen cometido contra una persona.”
Sobre las órdenes de protección, Mauk aclaró que la policía las hace cumplir, pero no las emite.
“Nosotros no, no, no tenemos la autoridad,” explicó Mauk. “Eso sucede mediante un proceso que empieza en la oficina del secretario del circuito y pasa por el proceso judicial para que un juez la firme.”
Mauk dijo que la documentación puede ayudar a los investigadores a reconstruir lo sucedido.
“Toda evidencia nos es útil,” dijo, incluyendo “mensajes de texto,” “grabaciones de video o audio,” y “comunicación… capturada en mensajes de texto o de voz.”
Los defensores dicen que el proceso para obtener una orden de protección puede sentirse confuso e intimidante, especialmente para víctimas que ya lidian con trauma.
La abogada del refugio Peace at Home Family Shelter, Akayla Lyons, dijo que una petición para una orden de protección típicamente se presenta ante el secretario, luego la revisa un juez.
Lyons dijo que las peticiones pueden tener “desde media página hasta diez páginas,” dependiendo del patrón de abuso descrito.
Lyons mencionó que un desafío es el umbral legal requerido en Arkansas para calificar para una orden de protección.
“Alguien ha experimentado una gran cantidad de abuso, y es abuso mental y verbal, pero no ha llegado al nivel de ser abuso físico o amenaza de abuso físico, aunque está escalando.”
Lyons también dijo que el proceso en la corte puede ser un gran obstáculo para víctimas que han reunido el valor para presentarse. Explicó que en algunas audiencias, “el abusador puede entonces hacerle preguntas a su víctima en un intento de que no se dicte una orden de protección.”
Lyons describió lo difícil que puede ser ese momento emocionalmente, diciendo que las víctimas pueden sentir que finalmente encontraron la fuerza “para ir a la corte y decir lo que pasó,” solo para enfrentar a su abusador nuevamente “usando a veces las mismas tácticas que usaban durante la relación.”
Lyons dijo que el miedo y la intimidación también pueden afectar si las víctimas continúan con el proceso judicial. Dijo que los abusadores pueden haberles “metido mucho en la cabeza” mensajes como “nadie te va a creer,” y que el entorno de la corte — testificar, ver otras personas presentes y enfrentar preguntas — puede ser abrumador.
Peace at Home dijo que hay apoyo disponible incluso para personas que no están seguras de cuáles son sus opciones.
Lyons dijo que un callejón sin salida común es simplemente no saber por dónde empezar: “Muchas veces lo que vemos es que han estado aisladas… y entonces cuando están listas, nuestra organización está aquí… nuestra línea de ayuda es 24/7, así que siempre pueden llamar.”
Lyons dijo que Peace at Home ofrece una variedad de servicios, incluyendo refugio, consejería, programas de apoyo y representación legal gratuita para órdenes de protección y asuntos familiares relacionados.
“Nuestros servicios legales de representación son gratuitos de principio a fin,” afirmó.
La línea de ayuda 24/7 del Peace at Home Family Shelter es el 479-442-9811.