En Palma, las noticias sobre operativos policiales contra la venta ambulante ilegal son bastante frecuentes, pero Palma dista mucho de ser la única localidad que afronta este problema.
La Asociación de Comerciantes de Alcudia ha solicitado al ayuntamiento que refuerze los controles en la playa para combatir el comercio ilícito. Si bien valora positivamente una reciente operación de la Guardia Civil y la Policía de Alcudia contra la venta de productos falsificados en establecimientos —hubo actuaciones similares en Can Picafort y Playa de Muro—, el presidente de la asociación, Francisco Vénzala, advierte de una “contradicción”. Las medidas contundentes contra los comercios deben acompañarse de la persecución de la “cada vez más prolífica venta ambulante no autorizada en la zona de la playa de Alcudia“.
Vénzala, sugiriendo que esta práctica se está “tolerando”, subraya que “afecta gravemente al comercio local, proyecta una imagen negativa para el turismo y deja al consumidor indefenso ante productos que pueden no ser seguros”.
Por supuesto, el problema no se limita a la playa. Como ejemplo, el principal núcleo turístico, el de la Avda. Pedro Mas y Reus y sus alrrededores, está plagado de vendedores no autorizados. En el vasto complejo de Bellevue, estos individuos merodean sin aparente impedimento. No existen obstáculos para el acceso y se observa una evidente falta de presencia de seguridad.