Forbes acaba de publicar la lista de los pueblos más bonitos del mundo para 2025 —según Unforgettable Travel Company— y Valldemossa se sitúa en el puesto número 17 del ranking. Se describe así: “Dormido en los pliegues de las montañas de Mallorca, Valldemossa se alza como una nana de piedra —su latido emana de la Real Cartuja, un monasterio cartujo del siglo XIV (antiguo palacio real) donde el compositor Frédéric Chopin y la novelista George Sand pasaron el invierno de 1838. Sus antiguas celdas —hoy museo— aún custodian el piano Pleyel de Chopin y las cartas manuscritas de Sand. Mientras, callejuelas serpenteantes conducen junto a placas de Santa Catalina Thomàs —patrona de Mallorca— nacida en el pueblo en 1533. Su imagen serena preside los dinteles de las puertas mientras los lugareños relatan sus milagros —especialmente durante las Festes de la Beata— cuando procesiones empapadas de flores honran su legado.”
No obstante, el primer puesto ha sido para Bibury, en Inglaterra. “Anidado en el corazón de los Cotswolds, Bibury se despliega como un sueño acuarelado —donde las casitas de miel alineadas en Arlington Row; sus tejados musgosos susurran historias de tejedores del siglo XIV. El Río Coln murmura suavemente —serpenteando entre botones de oro y nomeolvides, mientras patos rollizos nadan con pereza bajo doseles de sauce. Cerca, la piscifactoría de Bibury invita a los visitantes a alimentar a los peces o a disfrutar de un picnic a la orilla del río, y la iglesia de St. Mary ofrece un momento de quietud entre piedra antigua —mientras el aire transporta el aroma de lavanda en flor, mezclado con el de scones recién horneados”, afirman los expertos.
Por otro lado, Michael Douglas y su esposa, Catherine Zeta-Jones, son dos visitantes asiduos a Valldemossa durante el verano mallorquín. Su propiedad familiar en Mallorca se encuentra en la costa cercana a Valldemossa. El famoso actor pagó 3.5 millones de dólares por s’Estaca en 1990 y la puso a la venta primero por 60 millones de libras en 2014, luego por 32 millones en 2019, y, al no encontrar comprador, finalmente decidió retirarla del mercado. Ahora, él y su esposa pasan largas temporadas en la casa, que ha sido extensamente reformada con los años.
La propiedad está situada en el entorno inigualable del pueblo de Valldemossa, donde el precio de la vivienda se situa en 4.019 libras por metro cuadrado según datos del portal Idealista de agosto de 2024. Ubicado en un majestuoso valle rodeado de montañas, es el pueblo más alto de las Baleares, a 437 metros sobre el nivel del mar.
Tiene una población aproximada de 2.000 habitantes, gracias a lo cual logra mantener su encanto tradicional, rodeado de campo virgen. Desde su puerto hasta sus urbanizaciones, este municipio es un remansó de paz y un verdadero tesoro cultural, esperando a ser descubierto en cada esquina.
