Drones ucranianos atacaron una base aérea rusa el viernes, destruyendo dos aviones de combate Su-34.
La base aérea se usa como punto de reuniòn para aviones que fueron dispersados de ubicaciones más vulnerables.
El ministerio de defensa británico dijo que, a pesar de estos esfuerzos, los aviones rusos siguen bajo amenaza.
Según un nuevo informe de inteligencia occidental, fuerzas ucranianas atacaron una base aérea rusa que sirve como refugio para aviones retirados de zonas más peligrosas.
Ucrania usó drones de largo alcance para golpear la base aérea de Marinovka, en la región de Volgogrado, a más de 270 millas del frente, destruyendo al menos dos aviones Su-34.
Rusia usa Marinovka para operaciones diarias, pero también como resguardo para aviones reubicados desde otras bases amenazadas, dijo el ministerio británico en un informe.
Los Su-34 fueron trasladados a Marinovka desde la base de Morozovsk, más cercana al frente, tras ser atacados por drones ucranianos en agosto de 2024. Pero “a pesar de estos esfuerzos, la aviación rusa sigue vulnerable”, dijo el ministerio.
El ataque a Marinovka fue una operación conjunta de la agencia de seguridad ucraniana (SBU), fuerzas especiales y el ejército.
El SBU dijo que destruyó dos Su-34 y dañó otros dos, mientras el ejército afirmó que los cuatro fueron aniquilados. También hubo un incendio en las zonas de mantenimiento. Business Insider no pudo confirmar los detalles.
Los Su-34 “Fullback” son un gran problema para Ucrania, ya que Rusia los arma con