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Nicolas Hohls, de 27 años, se esta recuperando despues de ser atacado por dos hienas que entraron en su tienda de campaña mientras dormía en la Reserva Natural de Cape Vidal, en St. Lucia, Sudáfrica.
Uno de los animales acabó con parte de la cabeza de Hohls dentro de su boca, con sus mandíbulas agarrando su mejilla y cráneo, mientras que la otra se aferró a su tobillo izquierdo.
"Cuando me di cuenta de lo que estaba pasando, fue puro instinto. Sabía que tenía que luchar para sobrevivir", contó Hohls a la revista PEOPLE sobre el ataque, que ocurrió mientras asistía a una despedida de soltero.
Un hombre en Sudáfrica está hablando sobre tener que "pelear para sobrevivir" después de ser atacado por dos hienas durante su estancia en una reserva natural para una despedida de soltero.
El sábado 30 de agosto, Nicolas Hohls, de 27 años, llegó a la Reserva Natural de Cape Vidal con su padre, Colin, listo para que comenzaran las celebraciones. Hohls y unos amigos habían estado pescando durante el día y tomaron algo de comida y unas cervezas esa noche antes de irse a dormir cansados, después de una semana de trabajo, alrededor de la 1: la madrugada.
Aproximadamente media hora después, dijo que dos hienas lo atacaron después de que una entrara en su tienda por una abertura de unos 15 centímetros que había dejado abierta para ventilación.
Uno de los dos animales acabó con parte de su cabeza dentro de la boca, con las mandíbulas alrededor de su mejilla y cráneo, mientras el otro le mordió el tobillo izquierdo.
"Una fue a por mi pierna y la otra a por mi cara y cabeza. Las combatí liberando mi cara y tobillo, luego atacando los ojos de una y metiendo mi mano en la garganta de la otra", relata Hohls.
"Estaba dormido… cuando me di cuenta de lo que pasaba, fue puro instinto. Supe que tenía que luchar para sobrevivir", añade, contando que "reaccioné inmediatamente. Me liberé y fui directo a sus puntos débiles: los ojos y la garganta. Todo fue instinto y adrenalina".
Los gritos de Hohls despertaron a su padre, que estaba en la tienda de techo arriba de la suya. "Mi padre actuó inmediatamente. Me encontró en un charco de sangre en mi tienda, me metió en el coche y me llevó directo al hospital de Ballito", explica.
Insiste en que cerró su tienda "igual que muchas veces antes" y dice: "He acampado en Vidal antes sin problemas. Esa noche dejé una pequeña abertura para el aire. Si las hienas querían entrar, habrían encontrado una manera de todos modos, y eso fue exactamente lo que pasó".
Dijo que la "pelea duró como 60 segundos" y fue "un minuto de infierno", en un texto que escribió para recordar el incidente.
Hohls ahora se centra en mejorar, diciendo que los médicos han indicado que la recuperación total llevará "aproximadamente un mes".
"Me han puesto como 30 puntos en la cabeza, la mano y la mejilla. Mi tobillo izquierdo y mi muslo derecho también tienen heridas profundas de perforación, pero por suerte no se me rompió ningún hueso", cuenta.
"Estoy mucho mejor… Los doctores están contentos con mi progreso y no ha habido señal de infección", comparte Hohls.
"Por ahora, se trata de descansar y permitir que mi cuerpo se cure adecuadamente", dice, añadiendo que está "muy agradecido de estar vivo" y de que "tuvo la fuerza para contraatacar" cuando lo hizo.
La Reserva Natural de Cape Vidal no respondió inmediatamente cuando PEOPLE solicitó comentarios sobre el ataque.