El sector complementario de Mallorca ha respondido a las declaraciones de la vicepresidenta ejecutiva de la Federación de Hoteleros de Mallorca, María José Aguiló, en torno a la calidad, la inversión y los precios.
A principios de esta semana, Aguiló instó a otras ramas de la industria turística a elevar su nivel mediante la inversión en mejoras. Destacando la inversión a largo plazo y el compromiso con la calidad de los hoteles, equiparó esto con una “política de precios sólida”. “Los clientes saben que si pagan más, esperan un servicio de calidad a cambio. Algunos sectores de la industria cumplen esa expectativa, otros no.”
Las observaciones de Aguiló se produjeron en el contexto de una temporada caracterizada por un ligero aumento de la llegada de turistas en comparación con 2024 (según las cifras disponibles hasta julio), por una ocupación hotelera en línea con lo previsto, pero por un menor gasto en el sector complementario, una tendencia que ya era evidente en 2024.
Miguel Pérez-Marsá, presidente de la asociación de ocio nocturno ABONE, insiste en que “la cuestión no es si se renueva o no, sino que la gente no tiene dinero”. Sostuvo que muchos establecimientos han realizado “inversiones mayores que las de algunos hoteles”, pero que los precios del viaje y el alojamiento terminan absorviendo la mayor parte de los presupuestos cada vez más reducidos de los turistas. “El ocio nocturno y los restaurantes también han invertido, pero estamos más fragmentados.”
Añade que la temporada “no ha sido buena”, peor que la de 2024 y lejos de la de 2023. El gasto medio por persona ha caído y los costes operativos han aumentado.
En cuanto a los costes, Pérez-Marsá señala el incremento salarial del nuevo convenio colectivo de hostelería, cuyas negociaciones, como siempre, estuvieron lideradas por la federación de hoteleros y dejaron al sector complementario sintiéndose marginado y teniendo que aceptar lo finalmente acordado.
El acuerdo supuso un aumento del 13,5% en tres años: seis por ciento este año, cuatro por ciento en 2026 y 3,5% en 2027. “Ellos (los hoteleros) firmaron un convenio con una subida el primer año que nos ha afectado mucho.” Este septiembre, muchos clubes han tenido que cerrar entre semana y limitar su apertura a los fines de semana.
El presidente de la Asociación de Restaurantes de CAEB, Juanmi Ferrer, comparte la opinión de Pérez-Marsá y apunta a un factor adicional: el problema de una “oferta low-cost”. Se refiere en particular a los supermercados de bajo costo. Estos perjudican al resto y “devalúan las zonas de playa”. Además, los restaurantes “tienen problemas constantes con las terrazas, normativas que no afectan a otros, quejas de los vecinos, etcétera.”