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En algunas partes de Mallorca, se dice que el turismo en esta Semana Santa está a la par con la temporada alta, como consecuencia de cifras récord en cuanto a vuelos y hoteles abiertos.
Las comparaciones con la Semana Santa de 2024 no son del todo satisfactorias porque los horarios de verano de las aerolíneas no estaban en vigor el año pasado. El Domingo de Pascua fue el 31 de marzo y, inevitablemente, hay más vuelos este año. Aun así, la diferencia que hacen tres semanas es llamativa. El número de vuelos a las Islas Baleares entre el 11 y el 21 de abril es de 11,240. Entre el 22 de marzo y el 1 de abril de 2024 hubo 7,720.
La disponibilidad de plazas apunta a un buen rendimiento de los dos principales mercados turísticos extranjeros, Alemania y el Reino Unido. En el caso del Reino Unido, esta disponibilidad ha aumentado más del 100% en comparación con la última Semana Santa.
El presidente de la Asociación Hotelera de Playa de Palma, Pedro Marín, señala que la fecha de la Semana Santa de este año es “muy positiva” para el turismo. “Tanto que sería bueno que las vacaciones se fijaran en abril. Tenemos precios más altos porque es este mes y el 94% de la capacidad hotelera está disponible, con una previsión de ocupación del 80%. Estas cifras son propias de la temporada alta”.
El 92% de los hoteles asociados a la Federación Hotelera de Mallorca están abiertos, con una ocupación de alrededor del 80% en los centros donde hay un fuerte enfoque en el turismo deportivo y de actividades, como Alcudia, Cala Rajada y Playa de Palma.
El clima, según Marín, no juega un papel importante. “Los turistas en esta época del año no buscan turismo de sol y playa. Buscan más la gastronomía y el turismo cultural. El mal tiempo no es un factor decisivo para las reservas”.
Habrá una disminución después de la Semana Santa, pero la proximidad de la Semana Santa a mayo y a lo que aún se considera el inicio de la temporada turística principal ayuda a justificar el alto nivel de apertura hotelera.
Mientras que los hoteles tienen una buena Semana Santa, el sector de alquileres vacacionales está pasando por un momento menos favorable. La ocupación estimada, según la asociación Habtur, es del 60%, cinco puntos menos que la última Semana Santa y a pesar de las tres semanas de diferencia.
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