Se afirma que el turismo de salud y belleza está en pleno auge en Mallorca, con visitantes que viajan a la isla principalmente para someterse a tratamientos, pero también para disfrutar del clima, las compras y la gastronomía.
Prueba de ello es la inauguración de la primera clínica de ‘longevidad’ de Mallorca, Iune, que actualmente se halla en proceso de ultimar acuerdos con hoteles de lujo como La Residencia, en Deià. El jefe de conserjería y director de experiencias del hotel, Pep Ferreiro, señala que están trabajando en la creación de paquetes que incluyan tratamientos de salud y belleza, además de alojamiento y otros servicios.
Explica que la pandemia provocó un cambio. Los clientes ahora buscan más experiencias, especialmente aquellas centradas en el bienestar, la relajación y la salud. Esto ha llevado a los hoteles de Mallorca, particularmente a los de gama alta, a adaptarse a esta demanda. “Intentamos mostrarles el estilo de vida mallorquín, ralentizar el ritmo de nuestros huéspedes y permitirles relajarse en un entorno idílico y único, como el que ofrecen la Serra de Tramuntana.”
María José Aguiló, vicepresidenta de la Federación de Hoteleros de Mallorca, apunta que las nuevas rutas desde Montreal y desde Abu Dabi abren aún más el mercado norteamericano y abren las puertas a Oriente Medio, “marcando el inicio de una nueva era con Asia”. Esto, afirma, representa una oportunidad para toda la isla, ya que estos turistas poseen un poder adquisitivo superior a la media.
Cámara de crioterapia en la Clínica Iune. Foto: Iune.
Ambos mercados son de especial interés para Iune. La gran mayoría de sus clientes son norteamericanos, árabes y también alemanes. Mallorca, debido al clima, las conexiones aéreas y su ubicación, fue la elegida para la clínica de longevidad en lugar de Fráncfort. La clínica en Palma cuenta con tecnología punta. “Muchos estadounidenses, árabes y alemanes vienen durante una semana, se alojan en hoteles de lujo, reciben tratamientos por la mañana y dedican el resto del día a disfrutar de la isla.” Entre sus instalaciones se incluye una cámara de crioterapia de cuerpo entero.
Aguiló añade: “Mallorca debe estar preparada para satisfacer las demandas de estos turistas”. Una fuerte inversión ha ayudado a los hoteles a reposicionar su producto, y un número creciente de visitantes viaja desde destinos más lejanos. “El turismo de larga distancia no es un salto cuantitativo, sino estratégico. Mallorca debe ser proactiva para competir eficazmente en una liga distinta.”