El presidente estadounidense Donald Trump ha repetido sus críticas hacia Rob Reiner, después de que sus comentarios anteriores sobre el director de Hollywood asesinado, un crítico de Trump desde hace mucho tiempo, provocaran una condena generalizada.
El presidente estadounidense dijo a los periodistas que el director era “muy malo para nuestro país”, después de haber escrito antes en Truth Social que la muerte de Reiner estaba vinculada al “síndrome de demencia de Trump”, un término que usa a menudo para describir a sus críticos.
Reiner y su esposa, Michele Singer Reiner, fueron encontrados muertos en su casa de Los Ángeles el domingo, y la policía ha arrestado a su hijo Nick bajo sospecha de asesinato.
No han sugerido ningún motivo en el caso, ni ninguna evidencia de que la política y críticas de Reiner hacia Trump tuvieran algún papel.
En su publicación en redes sociales, que calificó las muertes de la pareja como “muy tristes”, Trump criticó a Reiner, diciendo: “Era conocido por volver loca a la gente con su obsesión furiosa por el presidente Donald J. Trump”.
Esos comentarios fueron ampliamente criticados, incluso por republicanos prominentes.
El representante de Kentucky, Thomas Massie, un republicano que ha tenido conflictos con Trump desde que el presidente regresó a la Casa Blanca en enero, escribió en X: “Independientemente de lo que pensaras sobre Rob Reiner, este es un discurso inapropiado e irrespetuoso sobre un hombre que acaba de ser brutalmente asesinado”.
Añadió: “Supongo que mis colegas electos del GOP, el vicepresidente y el personal de la Casa Blanca simplemente lo ignorarán porque tienen miedo? Reto a cualquiera a defenderlo”.
La republicana de Georgia, Marjorie Taylor Greene, quien una vez fue una firme partidaria de Trump antes de convertirse recientemente en una crítica frecuente, dijo que “esta es una tragedia familiar, no se trata de política o enemigos políticos” y que los asesinatos deberían ser “recibidos con empatía”.
Varios otros miembros importantes del partido de Trump parecieron distanciarse de los comentarios. El senador John Kennedy, un republicano que representa a Luisiana, dijo que creía que Trump no debería haber hecho esos comentarios.
“Creo que un hombre sabio una vez no dijo nada. ¿Por qué? Porque era un hombre sabio”, dijo Kennedy. “Creo que el presidente Trump no debería haber dicho nada. Pienso que cuando el presidente dice este tipo de cosas, resta valor a sus logros políticos”.
Reiner fue un demócrata de toda la vida y un prominente activista liberal, y hablaba frecuentemente en contra de Trump.
En 2017, por ejemplo, llamó a Trump “mentalmente no apto” para el cargo. Y tan recientemente como en octubre, Reiner dijo que creía que Trump estaba inaugurando una era de “autocracia plena” en los EE. UU.
Horas después de su publicación en redes sociales, Trump repitió sus pensamientos sobre Reiner en comentarios dados en el Despacho Oval a periodistas, describiendo al director como una “persona demente” que estaba parcialmente “detrás” de acusaciones anteriores de colusión entre Rusia y el equipo de Trump.
“No era fan de Rob Reiner en absoluto, de ninguna manera, forma o manera”, dijo.
Trump ha criticado en el pasado a enemigos políticos después de su muerte.
Tras la muerte del senador de Arizona, John McCain, con quien tuvo conflictos regularmente, en 2019, por ejemplo, Trump dijo que “nunca fue fan” y “nunca lo sería”.
En otro incidente el mismo año, Trump bromeó diciendo que el difunto legislador demócrata John Dingell podía estar “mirándolo hacia arriba” desde la tumba, un comentario que fue ampliamente interpretado como una sugerencia de que Dingell estaba en el infierno.
En una declaración después de los comentarios sobre Dingell, la Casa Blanca dijo que el presidente solo “estaba improvisando”.
Reiner, que tenía 78 años, era conocido por dirigir varias películas icónicas en una variedad de géneros, incluyendo *This is Spinal Tap*, *Stand By Me*, *Misery* y *A Few Good Men*.
Se casó con Michele, actriz, fotógrafa y productora, en 1989, recordando más tarde que se conocieron durante la realización de una de sus películas más conocidas, *When Harry Met Sally*. La pareja tuvo tres hijos juntos, incluido Nick, de 32 años.
Michele, de 68 años, era dueña de la agencia de fotografía y casa de producción Reiner Light.