El presidente de EE.UU., Donald Trump, pidió a las autoridades brasileñas que terminen con el proceso judicial contra el ex presidente Jair Bolsonaro, acusándolos de hacer una "CAZA DE BRUJAS".
Bolsonaro, quien gobernó Brasil entre 2019 y 2022, está siendo juzgado por presuntamente intentar un golpe de estado contra el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva. El ex mandatario niega cualquier participación en el supuesto plan.
En una publicación en redes sociales, Trump dijo que Bolsonaro "no es culpable de nada, excepto de luchar por EL PUEBLO" y les pidió a los fiscales: "¡DEJEN EN PAZ A BOLSONARO!".
El presidente Lula respondió que Brasil es un país soberano y "no aceptará interferencias ni órdenes de nadie".
"Nadie está por encima de la ley. Especialmente quienes amenazan la libertad y el estado de derecho", escribió en X.
En otra publicación en Truth Social, Trump elogió a Bolsonaro como un "líder fuerte" que "realmente amaba a su país".
El expresidente estadounidense comparó el caso de Bolsonaro con los juicios que él mismo enfrentó entre sus dos períodos presidenciales:
"Esto no es más, ni menos, que un ataque a un rival político. ¡Algo que conozco bien! A mí me pasó, pero diez veces peor", afirmó.
Bolsonaro agradeció las declaraciones de Trump, llamando a su proceso una "clara persecución política" en un mensaje.
La ministra de Asuntos Institucionales, Gleisi Hoffmann, respondió: "La época en que Brasil obedecía a EE.UU. fue bajo Bolsonaro. El presidente estadounidense debe ocuparse de sus problemas, que no son pocos, y respetar nuestra soberanía y justicia".
Este intercambio ocurre mientras Lula recibe a representantes de China, Rusia y otros países en una cumbre del BRICS en Río de Janeiro.
Trump y Bolsonaro tuvieron una buena relación cuando ambos eran presidentes, incluso se reunieron en la Casa Blanca en 2019.
Los dos perdieron elecciones y nunca reconocieron su derrota públicamente.
Una semana después de la toma de posesión de Lula en enero 2023, simpatizantes de Bolsonaro invadieron edificios gubernamentales en Brasilia. Las autoridades lo consideran un intento de golpe de estado.
Bolsonaro estaba en EE.UU. en ese momento y niega cualquier vinculo con los disturbios.
Además, está inhabilitado para postularse a cargos públicos hasta 2030 por difundir información falsa sobre el sistema electoral, pero dice que luchará contra esa prohibición para candidatearse en 2026.
En su primera declaración ante el tribunal el mes pasado, Bolsonaro calificó un golpe de estado como algo "abominable". Si es declarado culpable, podría enfrentar décadas de prisión.