Reflexionar sobre el final de la vida siempre resulta difícil, si bien para algunos puede ser de utilidad planificar con antelación. Si usted o sus seres queridos desean que sus restos sean repatriados al Reino Unido desde España, he aquí lo que debe saber.
Quizás haya pasado su jubilación en España, pero no desee ser enterrado aquí. Tal vez prefiera que su última morada esté en el Reino Unido, cerca de su familia, para que puedan visitar su tumba con facilidad cuando lo deseen.
O bien, puede que usted sea el hijo o la hija de un progenitor anciano y le esté ayudando a investigar sobre sus deseos de ser repatriado al Reino Unido cuando llegue el momento.
Es posible incluso que un ser querido ya haya fallecido en España y ahora se sienta abrumado ante la necesidad de trasladar su cuerpo o sus cenizas al Reino Unido.
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Existen dos modalidades de repatriación entre España y el Reino Unido. La primera consiste en el traslado del cuerpo y la segunda, en la cremación en España y el posterior transporte de las cenizas al Reino Unido.
La legislación española estipula que el entierro, la incineración o el embalsamamiento deben realizarse en un plazo de 48 horas tras el fallecimiento, a menos que las autoridades locales otorguen un permiso especial para demorarlo.
Por consiguiente, si lo que se desea es trasladar el cuerpo al Reino Unido, la práctica más común es el embalsamamiento. Se trata de un requisito legal indispensable para el transporte internacional de restos humanos.
El primer paso consiste en localizar en el Reino Unido la funeraria con la que desea contar. Suelen gestionar repatriaciones y pueden guiarle en todo el proceso. Asimismo, se asegurarán de reunir toda la documentación necesaria y de cumplir con los requisitos locales.
Alternativamente, puede ponerse en contacto directamente con un servicio especializado en repatriaciones que tenga experiencia en traslados entre España y el Reino Unido. Una rápida búsqueda en Google le mostrará numerosas empresas.
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La documentación que su funeraria o el especialista en repatriación necesitarán incluye:
Pasaporte del fallecido.
Certificado de defunción local.
Certificado de embalsamamiento.
Certificado de ausencia de infección.
Autorización de traslado o permiso para sacar el cuerpo del país.
De estos documentos, algunos deberán ser facilitados por usted, mientras que otros los obtendrán ellos mismos de las autoridades.
¿Cuál es el coste de una repatriación entre el Reino Unido y España?
Los precios varían en función de la funeraria o el servicio de repatriación que se contrate. Pueden partir de unas 1.900 libras (aproximadamente 2.169 euros) y ascender hasta unas 4.000 libras (4.566 euros).
Los costes pueden ser superiores si la repatriación se realiza desde las Islas Canarias.
Los gastos de repatriación también pueden incluirse en planes funerarios específicos de repatriación. Se trata de un tipo de plan al que se contribuye mensualmente para preparar el final de la vida, de modo que todo esté pagado por adelantado y sus seres queridos no tengan que preocuparse por nada.
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Transporte de cenizas al Reino Unido
También es posible trasladar las cenizas desde España. De nuevo, puede contratar a una empresa para que lo haga o puede llevarlas consigo personalmente.
Para ambos procedimientos, necesitará:
Copia del certificado de defunción.
Certificado de cremación.
Pasaporte original del fallecido.
Declaración de la funeraria.
Declaración de aduanas –necesaria para el transporte internacional de restos humanos. Su funeraria puede gestionarlo.
Tenga en cuenta que puede haber normativas diferentes según la región de España en la que se encuentre.
Llevar las cenizas al Reino Unido personalmente
Si traslada las cenizas consigo al salir de España, también deberá presentar la documentación anteriormente mencionada.
Por lo general, las cenizas pueden transportarse en el equipaje de mano, si bien es recomendable verificar la normativa de la aerolínea con la que viaje.
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¿Cuánto tarda una repatriación entre España y el Reino Unido?
Por lo general, la mayoría de las empresas indican que el proceso de repatriación tarda entre cinco y diez días hábiles.
Es crucial recordar que, a menudo, los trámites administrativos en España pueden ser lentos y podrían producirse demoras en la obtención de ciertos documentos, por lo que es aconsejable prever un margen de tiempo adicional.
El plazo también depende de la disponibilidad de vuelos.
La Embajada británica en Madrid y sus consulados en España también pueden asistirle durante el proceso, sirviendo de enlace con las autoridades locales y proporcionando listas de traductores y funerarias. Asimismo, pueden emitir documentos de viaje de emergencia si fuera necesario.