¿Todo ciudadano británico puede ganar 61 libras con una simple revisión del extracto bancario?

La cifra se basa en las últimas estimaciones poblacionales de 54.9 millones de adultos y en datos de una encuesta gubernamental que muestra que el 49% de los adultos en el Reino Unido paga por suscripciones de entretenimiento y libros.

Como la persona promedio pierde alrededor de £61 cada año en suscripciones que ya no usa u olvidó cancelar, el desperdicio total alcanza los £1.64 mil millones anualmente.

Acabo de llegar de las tiendas. Esto no es una crisis del costo de vida, esto es una crisis que te chupa la vida, a menos, claro está, que seas un billonario que no paga impuestos. Mi compra semanal de los lunes de productos esenciales fue de £94. ¡Normalmente es alrededor de £52!
— Lorraine Bell🏴󠁧󠁢󠁳󠁣󠁴󠁿🇨🇦 Extremist (@rainie1410) 13 de octubre de 2025

Joe Lytwyn, experto en finanzas personales de la compañía de tarjetas de crédito thimbl.com, dijo: “Estas cifras son escandalosas para suscripciones que la gente ni siquiera usa. En una crisis del costo de vida, este es dinero que la gente simplemente no se puede permitir desperdiciar.”

A principios de este año, una investigación de Visa reveló que la Generación Z (de 13 a 28 años) gasta un promedio de £305 por mes en servicios de suscripción. Esto es tres veces más de lo que gasta la Generación X (de 44 a 59 años), que gasta £91, y los Baby Boomers (de 61 a 79 años), que gastan £108. Los Millennials (de 29 a 44 años) también gastan una cantidad significativa, £261 por mes.

El streaming antes se presentaba como la alternativa más barata a la televisión por satélite o por cable, pero para muchas familias, el costo combinado de Netflix, Prime Video y Disney+ ahora rivaliza o supera a los paquetes de televisión tradicionales.

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Joe comentó: “El streaming ya no es la opción económica. Cuando consideras múltiples plataformas, no es extraño que muchos se sorprendan al sumar lo que gastan cada año; es el costo de unas vacaciones, una nueva caldera o la Navidad para toda la familia.”

El Reino Unido se ha convertido en una nación de acumuladores de suscripciones. Según datos de la industria:

* Dos tercios de los hogares británicos tienen suscripción a al menos uno de estos: Netflix, Prime Video o Disney+.
* Casi uno de cada cinco hogares ahora paga los tres, comprometiéndose a más de £500 al año solo en streaming.
* El 44% de los hogares ahora usa un servicio de streaming con anuncios, lo que significa que tanto pagan como aún ven publicidad.

“Lo que es llamativo es que la gente no solo acumula suscripciones, sino que incluso paga para ver anuncios”, dijo Joe. “La industria ha normalizado de manera inteligente un gasto que, hace unos años, hubiera parecido escandaloso. Para muchos, se ha vuelto normal suscribirse y olvidarse, sin cuestionar nunca si sigue siendo una buena oferta.”

El problema no son solo los televidentes entusiastas. Según Citizens’ Advice, los llamados “patrones oscuros”, como las pruebas gratuitas que se renuevan automáticamente sin una advertencia clara, le costaron a los consumidores británicos £688 millones en 2023-24.

Joe explicó: “No es solo nuestra propia falta de memoria; es la forma en que están diseñados algunos servicios de suscripción. Una prueba gratuita rara vez es gratis. Las empresas dependen de que la gente olvide cancelar, y hacen el proceso de cancelación deliberadamente complicado. Esto no es elección del consumidor, es una trampa.”

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thimbl.com dice que parte del problema es cultural. El gasto en suscripciones se ha infiltrado en cada rincón de la vida moderna, desde el streaming y la música, hasta cajas de recetas, aplicaciones de fitness, entregas de comida para mascotas e incluso productos esenciales para el hogar.

“Hace diez años, una suscripción significaba tu contrato de teléfono y quizás Netflix”, añadió Joe.

“Ahora, hemos normalizado suscribirnos a todo, parece más fácil ‘configurar y olvidar’ que buscar y comparar.

“Pero lo que comienza como £7.99 aquí y £10.99 allá, pronto se convierte en cientos de libras al año.”