¿Qué te atrajo del papel del padre radicalizado en la nueva película de suspenso, Sovereign?
El guión es como una obra de arte, trata sobre el “movimiento ciudadano soberano”, que – como cualquier otra teoría de conspiración – se basa en lo más extremo del pensamiento estadounidense. Me hizo pensar en el ataque del 6 de enero al Capitolio; ¿qué lleva a estadounidenses normales de clase trabajadora a tomar esas decisiones de vida? Confío en que el Reino Unido va a celebrar esta película, porque creo que es un poco demasiado inteligente para el público americano, francamente. Una sensibilidad más europea va a responder con más fuerza que una americana.
¿El remake de Highlander te produce terror, indiferencia u optimismo con cuidado?
Highlander es una de mis películas favoritas. Es una película increíble de esgrima con Christopher Lambert, Sean Connery y Clancy Brown como el Kurgan, el villano ruso malvado, al que prefiero sobre Darth Vader cualquier día. La banda sonora es de Queen. Es una locura. Chris Pratt nunca había visto Highlander, entonces reservé una sala de proyección en medio de la tarde en el estudio donde grabábamos Parks and Recreation, y la vimos solos. Para responder a la pregunta: me gusta apoyar a mis colegas artistas. No soy una persona cínica. Espero que, de alguna manera, sea aún mejor que la original. ¿Por qué no estoy en el remake? Esa es una gran pregunta. Hay un tipo australiano… Russell algo… y la gente parece seguir inclinándose hacia su dirección.
¿Cómo fue trabajar con el genio que es Alex Garland en Devs e interpretar el papel de un dios tecnológico?
Alex Garland es uno de los cineastas modernos más subestimados. Él hace estas grandes preguntas en nombre de todos nosotros. Con Devs, la pregunta es: ¿deberíamos dar poder a los controladores de nuestra tecnología sin ningún control o equilibrio? Interpretar a un dios tecnológico fue fascinante, hecho con drama humano auténtico y relaciones interpersonales. Filmamos en Santa Cruz, San Francisco y Londres. El edificio de Devs estaba en un estudio de sonido gigante en Manchester. Me encanta Manchester. Es una ciudad maravillosa y trabajadora. Me recuerda a Chicago, llena de encanto, poblada por gente trabajadora a la que le gusta un rollo de salchicha. Es difícil superar a Greggs. He probado los más elegantes. Tiene que ser un poco sucio.
Nunca había visto nada como tu actuación en The Last of Us en la televisión antes – una relación gay madura tratada con tanta ternura, seriedad y profundidad. ¿Cómo te afectó la historia de amor de Bill?
Gracias por el cumplido. Si tengo éxito a ese nivel, es porque el guión es así de exquisito. Todos están de acuerdo en que ese guión fue como un trabajo de magia.
Una de las cosas que amo de mi papá y mi gran familia de granja es que todos enseñamos. Todos pueden manejar un vehículo en reversa, estacionar un remolque, cavar un hoyo, hornear un pan o destripar un pez. Somos autosuficientes. El problema es que eso arruina la televisión y el cine para mí. Me eligen para personas que usan herramientas o manejan vehículos, y es horrible porque nunca dejo que un doble lo haga. Todo el tiempo, mi papá está sentado en mi hombro con los brazos cruzados, mirándome. Interpretar a Bill fue la experiencia más exquisita, pero cuando estaba procesando un ciervo que acababa de cazar, o sacando una zanahoria de la tierra, todo lo que pensaba era: “¿Mi papá se va a creer esto?”
Grabar esas escenas con Murray Bartlett… éramos como violinistas, tocando sonatas hermosas de nuestro viaje emocional que sonaban tan dulces juntas. Por eso el mundo respondió tan explosivamente, porque se reducía a la esencia de cada novela y obra de arte: “¿Cuál es el maldito sentido de todo esto?” El sentido es que las otras personas son tu propósito. Si no vives para hacerlas felices, entonces ¿cuál es el maldito sentido? Voy a llorar.
Habiendo comenzado con el saxofón barítono y ganando el premio de jazz Louis Armstrong en 1988, ¿tus aspiraciones profesionales iniciales estaban más enfocadas en la música?
Mi papá tenía un viejo saxofón tenor que tocaba de niño. Éramos ese tipo de familia frugal: “¿Quieres tocar música? Aquí tienes tu opción.” Estaba en una banda de marcha de un pueblo pequeño. Si eres fuerte, no importa qué instrumento toques, te dan el tambor grande, la tuba o el saxofón barítono. De adolescente, tenía aspiraciones de convertirme en actor, pero vivía en un vacío cultural. Mi consejero quería oír: doctor, abogado. No querían oír: “Quiero ser actor.” Decían: “No creo que esa sea una de las opciones.” Yo decía: “Supongo que quiero ser músico.” Decían: “No lo creo, amigo. ¿Qué clase de vida sería esa?” Afortunadamente, descubrí que te podían pagar por actuar en obras de teatro en Chicago. Estoy agradecido de que me gustara la música, aunque no terminó siendo mi carrera.
¿Has hecho mucho Shakespeare? Me encantaría verte interpretar el discurso “Sé fiel a ti mismo” de Polonio de Hamlet.
Eso es muy generoso: Polonio es un papel fantástico. He hecho un poco de Shakespeare. Quería terminar en el RSC o el Old Vic. Espero hacer más Shakespeare antes de que termine – creo que todavía me quedan un par de años como Romeo antes de que sea demasiado mayor.
Me encanta el bigote. Pero ¿cómo manejas la picazón de la barba? Me vuelve loco. CathChakravarty y JustSomeDad
Tengo deformidades físicas obvias que han hecho que no me consideren una de las grandes bellezas de mi época. En el lado positivo, puedo dejarme unas barbas prodijiosas. Si me pongo el pulgar en la boca y soplo, me crece como un octavo de pulgada. Ha sido una bendición maravillosa como actor poder lograr cualquier tipo de vello facial. Si pudiera elegir, tendría una barba grande todo el tiempo, porque es lo que la madre naturaleza quiso.
Hay dos tipos de picor. El primero es cuando te está saliendo y rompe la piel. Eso también puede causar irritación a tu pareja, así que hay que tener cuidado en momentos de cariño. El otro picor es cuando tu barba ya está tupida y empiezas a almacenar cosas en ella, como salsa o Guinness. Un maquillador me enseñó a usar un astringente, como Sea Breeze. Una vez por semana, le doy una buena fregada, y así se mantiene limpia de restos.
Con su esposa Megan Mullally en Parks and Recreation. Fotografía: NBC/NBCUniversal/Getty Images
¿Qué es lo mejor y lo peor de estar casado con Megan Mullally? ¿Tuviste problemas para mantener la seriedad ante su aterradora performance sexual como tu ex-esposa Tammy II en Parks and Rec? Reckoner y Neckron666
Ella es una diosa exquisita. Es la persona más graciosa que he conocido en mi vida – y he conocido a Mel Brooks y John Cleese. Baila, canta. Es un genio tanto del drama como de la comedia. Tiene un gusto increíble – con algunas pocas excepciones obvias. Nos peleamos por quien dejó el tapón de la pasta de dientes abierto. Pero estoy muy agradecido de que después de 25 años, ella todavía me elija a mí. La peor parte es que, de la misma manera que cuando conduzco en reversa mi padre está encima mío, cuando actúo, especialmente canto, Megan también está muy pendiente. Cuando estás casado con el Lionel Messi de la actuación, puede ser difícil mantener tus tiros a puerta.
Lo más loco de su sexualidad peligrosa era que, en Parks and Recreation, yo era conocido por aguantar la risa. Chris Pratt podía salir de la nada y hacerme reír, pero en general, a nadie le podía hacer reír. Megan entraba en la habitación y yo estaba perdido porque, por definición, ella sabe qué botones presionar. Todas nuestras escenas son ella usando su sexualidad como un arma contra mí, y yo perdí esa batalla hace mucho, mucho tiempo.
Sovereign está disponible en plataformas digitales. Little Woodchucks por Nick Offerman ya está a la venta. Nick Offerman estará en Manchester Aviva Studios el 26 de octubre, y luego de gira.