Una redada policial llevada a cabo en la madrugada en un local nocturno de gran affluencia en Rojales resultó en siete detenciones y numerosos cargos por posesión de estupefacientes y armas, de acuerdo con las autoridades españolas.
La operación, ejecutada por la Policía Nacional de Orihuela en coordinación con la Policía Autonómica Valenciana y la Policía Local de Rojales, tuvo como objetivo un establecimiento de ocio del centro urbano como parte de una campaña de control migratorio y seguridad ciudadana.
Los agentes detuvieron a seis personas por hallarse en situación irregular en España y a otra más que era buscada por orden judicial pendiente. Durante el registro, se formularon cinco denuncias por posesión o consumo de drogas y otras dos por tenencia de armas, en aplicación de la Ley de Seguridad Ciudadana.
Este dispositivo coordinado tuvo lugar el 23 de octubre y contó con la participación de la unidad canina de la Policía Local de Rojales, la cual auxiliió en el rastreo de las instalaciones en busca de narcóticos y otros objetos ilícitos.
Las autoridades señalaron que la operación se enmarca dentro de una campaña más amplia destinada a reforzar los controles de inmigración y combatir la delincuencia en las zonas de ocio nocturno de la provincia de Alicante.
Fuentes policiales alabaron la “eficaz cooperación” entre los cuerpos locales y nacionales, afirmando que esta garantizó una intervención rápida y segura.
“Estas actuaciones persiguen mantener la seguridad en nuestros espacios de ocio y velar por el cumplimiento de la legalidad,” manifestó un portavoz.
La redada forma parte de una serie más extensa de operaciones preventivas orientadas a asegurar el cumplimiento de la normativa en materia de extranjería y seguridad ciudadana en toda la región.